Ya regresan casi tantos españoles como los que se van. En el primer semestre de 2018, 39.166 españoles han vuelto al país, frente a los 40.856 que se han ido. El número de retornados se ubica, de ese modo, en máximos tras la fuerte salida de españoles en los primeros años de la crisis. Y el saldo migratorio se reduce a su mínimo desde 2008, aunque continúa siendo negativo, según datos del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) publicados este jueves.

El número de emigrados españoles (40.856) ha caído desde 2015, cuando 48.359 personas abandonaron el país, pero se mantiene alto comparado el número de españoles que se fueron en los primeros años la crisis. El saldo migratorio de españoles (llegadas menos salidas) continúa siendo negativo, aunque se ha reducido un 85% respecto del mismo período del año anterior. 

El aumento de la inmigración registrado en España en el primer semestre de este año ha servido para compensar el descenso demográfico que se ha producido en esos seis meses por la caída de los nacimientos y el incremento de las muertes. De este modo, se consolida el crecimiento de la población iniciado en el segundo semestre de 2015, explica el INE en un comunicado.

Entre enero y junio, el saldo migratorio fue de 121.564 personas, suficientes para compensar la caída demográfica (nacimientos menos muertes) de 46.273 personas registrada en ese periodo, con lo que la población española ha aumentado en 74.591 personas hasta los 46,7 millones de residentes.