Cerca de 400 personas participarán este domingo en Hernani dentro de la iniciativa Bizilagunak, que se desarrolla en el municipio por séptimo año consecutivo. Hernani, de la mano de Amher, se sumó a la misma desde que se puso en marcha y poco a poco ha ido cogiendo un gran realce. Personas de Hernani y otras llegadas desde otros lugares se reúnen en torno a una mesa para degustar una comida y, sobre todo, compartir vivencias y potenciar la interculturalidad. Al final serán 27 las comidas que se desarrollarán, con dos familias en cada una de ellas, además de las que tienen lugar entre los jóvenes, que serán 8 comidas.

Tal y como viene siendo habitual estos últimos años, Hernani contará con un acto que servirá de pistoletazo de salida a esta gran jornada. A las 13.00 horas están citados todos los participantes en las distintas comidas para vivir ese momento de puesta en marcha en la Plaza de los Gudaris. Se ofrecerán bertsos en euskera, que estarán también traducidos al castellano, inglés, francés y árabe. Como lo califican desde Amher, «es el momento mágico, cuando las familias que van a compartir mesa y mantel se conocen por medio de la persona que hace las labores de dinamizadora». Tras sacarse la foto de familia, será el momento de dirigirse a los domicilios para participar en la comida. «Es importante que se desarrollen en las casas y no en sociedades gastronómicas, ya que eso hace que se conozca mejor la realidad de la otra persona y es más íntimo, que es lo que se busca», señalan desde Amher. En el acto inicial de la plaza hernaniarra se darán cita también cuatro familias de Urnieta, que toman parte en Bizilagunak a través del grupo de Hernani.
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DV se reúne con Lucía Arias, Ana Artavia e Ixiar Egiguren, de Amher, y con los jóvenes Garazi Otxandorena y Andoni Pérez para conocer mejor el propósito de esta iniciativa. Lo tienen claro: «Lo que se quiere es fomentar la interculturalidad y normalizar la convivencia y la presencia de personas extranjeras en el municipio. Romper los estereotipos que existen sobre el otro es lo más importante».

Tienen claro que lo más difícil a la hora de participar en iniciativas como Bizilagunak es «dar el primer paso, participar por primera vez». En Hernani ya son muchos los que lo han hecho y participan todos los años, aunque en cada edición «se cambia la familia con la que comparten mesa. El objetivo es conocer realidades diferentes», remarcan.