El líder de los populares defendió la inmigración “ordenada” y “vinculada al mercado de trabajo”, pero ha dicho estar en contra del “populismo de efecto llamada”. “Así ha pasado recientemente en nuestro país por parte del Gobierno socialista, que ha motivado que nos encontremos en la mayor crisis migratoria de la última década”, ha añadido.

El líder popular ha abogado por “defender las fronteras europeas” y “apoyar a las fuerzas de seguridad del Estado”. A la vez, ha instado a ser solidarios con los países de origen, para los que propuso activar un plan Marshall con el que todos los estados europeos coordinen la ayuda al desarrollo a los lugares de los que proceden los migrantes. Casado ha argumentado que son millones las personas que quieren llegar a Europa y que “el Estado de bienestar europeo no puede sostener esos flujos”. La estrategia europea ya se centra en elevar los fondos para África. De momento el esfuerzo es limitado.

Otros tres representantes de partidos conservadores europeos han compartiedo el panel con Casado y sus intervenciones giraron en torno a la necesidad de no dejar que los partidos populistas monopolicen el debate sobre la migración en Europa.

El congreso del Partido Popular Europeo (PPE) elegirá el jueves a su candidato a las elecciones europeas de mayo y que a su vez aspirará a presidir la Comisión Europea. Casado ha adelantado que su partido apoya al alemán Manfred Weber, frente al finlandés Alexander Stubb, más centrista.
Además, llevó a ese foro otro asunto también en clave nacional. El PPE apoyó una resolución suya a favor de la “unidad territorial” de España en la que se condena el “secesionismo ilegal” que persiguen los partidos independentistas en Cataluña.