Alrededor de las 9.30 horas ha amarrado el Open Arms en el puerto de Algeciras (Cádiz) con los 87 inmigrantes y refugiados que el pasado 2 de agosto fueron rescatados en aguas del Mediterráneo a los que se les aplicará los procedimientos “normales y establecidos” para atender cualquier llegada vía marítima.

“No puede haber inmigrantes de primera y otros de segunda”, han argumentado a Europa Press fuentes gubernamentales que justifican la decisión del Ejecutivo de no conceder “ningún estatus especial” a estas 87 personas rescatadas por el buque de la ONG española Proactiva Open Arms.

A pesar de que a los 60 migrantes rescatados por el mismo buque hace más de un mes se les concedió un permiso humanitario especial de 30 días -al igual que los 45 días que se dio a los 629 del Aquarius a los que España ofreció un puerto seguro-, desde el Ejecutivo aseguran que, a partir de ahora, no habrá un trato “excepcional” y se seguirá el proceso normal para cualquier llegada a España, independientemente de que se produzca a través de buques de salvamento o en patera.

En el proceso habitual para la atención y acogida a los recién llegados existen varias fases. En primer lugar, el “primer contacto” lo establece Cruz Roja a través de un triaje sanitario, ha explicado a Europa Press la directora general de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR), Estrella Galán.

CRUZ ROJA: PRIMERA ATENCIÓN MÉDICA

Tras el desembarco de las 87 personas a una zona del puerto algecireño muy cercana al muelle de Crinavis, Cruz Roja tenía preparado un equipo para ofrecer a los pasajeros las primeras atenciones médicas. Concretamente, un Equipo de Respuesta Inmediata en Emergencias (ERIE) compuesto por unas 30 personas prestando la ayuda básica y socio sanitaria a los migrantes.

Este equipo es el que habitualmente se desplaza después de que salte una alerta por la llegada de una patera a una zona costera, algo que puede suceder “a cualquier hora del día”, recalcan desde la organización. Desde Cruz Roja, han señalado que sus voluntarios siempre están prevenidos para organizar a este grupo de personas que da la primera atención y que evalúa si debe producirse algún traslado hospitalario.

También se encarga del reparto de bebidas, comida, mantas, incluso ropa seca en el caso de los que entran en patera. Desde la organización apuntan que en este equipo suele haber personal sanitario, un mediador intercultural así como traductores. Además, hay expertos en detección de situaciones de trata de seres humanos.

A DISPOSICIÓN POLICIAL DURANTE 72 HORAS

A partir de ahí, los migrantes pasan a disposición policial durante 72 horas. En este tiempo, se realizan las primeras labores de identificación, la toma de huellas dactilares y el registro de las personas, ha precisado Galán a Europa Press.

Hasta ahora, esto se realizaba “normalmente” en comisarías, o en lugares “improvisados” en los puertos españoles, “en malas condiciones” para los recién llegados, según ha destacado Galán en declaraciones a Europa Press, haciendo hincapié en que actualmente existe un “intento” y “voluntad” de ordenar esta atención de las llegadas a costas.

“Desde el Aquarius (17 de junio) hasta hoy la diferencia es la puesta en marcha de recursos que garantizan la identificación y el procedimiento de acogida, algo que antes no existía”, ha dicho Galán, que ha destacado que, con los recursos que recientemente ha habilitado el Gobierno de Pedro Sánchez concretamente en Algeciras, “se desdibuja” la preocupación de que los migrantes “no accedan a su derecho al asilo o a otros procedimientos legales” tras su llegada.

Tras el primer triaje sanitario, los 87 inmigrantes y refugiados del Open Arms han sido trasladados al Centro de Atención Temporal a Extranjeros (CATE) recientemente habilitado en la zona portuaria. Será en este centro -que se puso en funcionamiento hace escasos días- donde a los pasajeros del Open Arms se les realice los trámites de identificación en esta ocasión.

ORDEN DE DEVOLUCIÓN O NO

A partir de las 72 horas -periodo en el que se habrá realizado una primera identificación y en el que podrán manifestar su voluntad de pedir asilo- a aquellos que no tengan un perfil humanitario “habitualmente” se les incoará una orden de devolución, de acuerdo a lo establecido en la Ley de Extranjería.

Por su parte, los que sí responden a un perfil humanitario pasarán a la Fase de Estabilización y Derivación en el nuevo Centro de Acogida, Emergencia y Derivación de Chiclana (Cádiz). Según ha manifestado Galán, está gestionado por varias ONG con el objetivo de que en ellos se haga “una identificación más serena y estable de los perfiles” de las personas.

Desde este centro, se derivará a cada persona en función de su perfil a los distintos recursos puestos a disposición por parte del Estado para su acogida y que llevan funcionando “durante años”, ha apuntado Galán, que ha dicho que espera que el modelo implantado en la zona de Algeciras para gestionar las llegadas de migrantes “se extienda” a otros lugares. En este sentido, ha reclamado la elaboración de un protocolo “porque aún hay puertos sin estos recursos” y donde sigue sin haber “garantías” para los migrantes.

En este sentido, la directora general de CEAR han hecho hincapié en que hay personas que son derivadas a calabozos o a alguno de los Centros de Internamiento de Extranjeros (CIE) que operan en España -unas instalaciones policiales de carácter no penitenciario diseñadas para poder ejecutar la expulsión del territorio nacional- sin que les dé tiempo “ni siquiera a pedir asilo”, lo que, según ha incidido, “vulnera la legislación”. Así pues, ha saludado los recursos que el Ejecutivo está poniendo en marcha para “ordenar” estas llegadas a España en situación irregular.