Las Palmas – Los centros de internamiento de inmigrantes de Canarias
albergan aún a 1.505 personas, más de un mes después de que se sobrepasara
su capacidad por la avalancha de cayucos llegados de Mauritania que obligó
a abrir dos instalaciones provisionales que siguen en activo. La cifra de
los internos que acogen en conjunto dichos centros, confirmada ayer por la
Delegación del Gobierno en Canarias, se ha reducido en cualquier caso en
más de 800 respecto a los últimos días de marzo, cuando se elevaba a
2.392, según las mismas fuentes oficiales.
   Esa reducción no ha
ido paralela, en cualquier caso, al descenso de las llegadas de barcas con
inmigrantes que, si bien han seguido arribando en las últimas semanas, lo
han hecho sin la intensidad de mediados de marzo pasado, cuando se
registraron totales de entre doscientas y trescientas personas detectadas
en pateras o cayucos rumbo al Archipiélago en periodos de menos de
veinticuatro horas.
   Las instalaciones, sobrepasadas. Así, mientras
las últimas expediciones de inmigrantes detectadas en las islas datan del
miércoles de la semana pasada, cuando catorce personas arribaron a
Lanzarote y otras sesenta a Tenerife, en esta última y en Gran Canaria
todavía permanecen en funcionamiento las instalaciones de internamiento
habilitadas provisionalmente en dependencias militares ante la referida
avalancha.
   En concreto, en Tenerife sigue operativo el
acuartelamiento de Las Raíces, que alberga a 429 internos en un lugar
equipado para un total de 500, y en Gran Canaria también continúa abierto
el de La Isleta, preparado de forma urgente para acoger a 400 personas y
ocupado actualmente por 93, conforme a las cifras de la Delegación del
Gobierno. Además, en el centro de internamiento estable de Hoya Fría, en
Tenerife, los inmigrantes alojados superan en cerca de un centenar la
capacidad prevista: 313 en un espacio con 238 plazas.