Protesta tras el Aquarius contra una acogida 'de postureo': "No es la foto de un día, sino derechos todos los días"

Un grupo de activistas se ha congregado en la madrileña Puerta del Sol para reivindicar los derechos de los migrantes en el Día Internacional de las Personas Refugiadas.Su lema: "La acogida no es la foto de un día, sino derechos de todos los días".

El Diario, Fabiola Barranco Riaza, 20-06-2018

En plena resaca emocional y mediática tras la llegada a Valencia de la flotilla del Aquarius con 630 personas rescatadas a bordo, un grupo de activistas se ha congregado en la madrileña Puerta del Sol para reivindicar los derechos de los migrantes en el Día Internacional de las Personas Refugiadas. Lo hacen con un mensaje claro: “La acogida no es la foto de un día, sino derechos de todos los días”.

Los activistas de la Red Solidaria de Acogida, una plataforma ciudadana que nació en 2015 como respuesta de hospitalidad ante la llegada de personas en busca de refugio, a su paso por la estación de Méndez Álvaro, se han colocado unos carteles con diferentes imágenes sobre el tratamiento de la cuestión migratoria en los medios de comunicación y el debate que se genera en la opinión pública.

Por eso portaban fotos como la de la reciente y polémica portada del diario ABC, imágenes de las jornaleras de la fresa en Huelva, así como del salto de la valla de Melilla o de vendedores ambulantes, entre otras. Por otro lado, como si fuera el negativo de la misma imagen, mostraban otras que reivindican el derecho a una “vivienda digna”, “vías seguras”, justicia y reparación a las familias víctimas del Tarajal” o la "búsqueda de un futuro mejor”.

La organización de la acción también ha leido un manifiesto en el que han expresado sus exigenecias, tales como la suspensión de devoluciones en caliente, la apertura de Vías Seguras, la incorporación inmediata al sistema de acogida de las personas decueltas por la aplicación del Reglamento de Dublín, o la derogación de la Ley de Extranjería.

Algunos turistas y transeuntes, pese al sol feroz y el calor, se acercaban con curiosidad. “A mí me parece muy bien que haya españoles que reivindiquen los derechos de las personas inmigrantes. Además cualquier persona va a entender que son seres humanos, lo contrario no entra en mi cabeza”, comentaba Paula, arropada por sus amigos de origen marroquí.

David, un profesor estadounidense ataviado con la camiseta de la selección española de fútbol, se detuvo para aclamar la actuación de España ante la crisis del Aquarius, al “responder a la obligación moral de atender y acoger” a quienes buscan refugio a este lado del mar. “Es un momento muy crítico para la humanidad”, ha afirmado  antes de mostrar su descontento ante el escándalo de los menores separados de sus padres en la frontera. Estados Unidos es un país de inmigrantes, no entiendo qué está pasando, Trump no nos representa”, se ha quejado.

A pesar del buen recibimiento de la acción, Miriam, una de las activistas se vio increpada por una señora que se acercó con actitud desafiante para decirle el tradicional "acógelos en tu casa”. Una consigna que Miriam rebatió al señalar que acoger significa que nuestro gobierno acoja, no que yo meta a nadie en mi casa. “Nosotros también hemos sido inmigrantes y refugiados”.

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