La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, ha salido al paso de las críticas recibidas por el ofrecimiento de acogida a 100 inmigrantes del Aquarius indicando que el Ayuntamiento ha atendido ya a unos 4.000 refugiados a pesar de que el Gobierno central no haya aceptado nunca las ayudas municipales que, desde 2016, se traducen en una veintena de viviendas.

“Cuando ofrecemos estancia para cien personas del Aquarius responde al conjunto de viviendas que ya en 2016 pusimos a disposición de la Comisión de Apoyo al Refugiado en el Ministerio pero lo que pasa es que nos consta que las tenían, porque las pusimos a disposición, pero estaban sin utilizar”, ha indicado la alcaldesa en un encuentro con la prensa. Las veinte viviendas se encuentran distribuidas por toda la ciudad y están vacías a la espera de ser ocupadas por familias refugiadas.

Carmena no ha ocultado su “muchísima alegría” al observar el cambio experimentado en el Gobierno de España con respecto a la política de refugiados. “Tengo muchísima alegría por el gran cambio observado en el Gobierno de España”. Ayer ella misma constataba la “terrible situación que significaba que el Aquarius no pudiera desembarcar en Italia” cuando “de pronto se sabe que se está dispuestos a acogerlos”. “Me llena de orgullo”, ha dicho.

La alcaldesa sale al paso de quienes han criticado que el ofrecimiento municipal de Madrid se haya reducido a la acogida de apenas 100 inmigrantes. Un número que sus detractores consideran escaso en comparación con la campaña de ‘Refugees Welcome’ mantenida por la corporación.

La diferencia de criterios es evidente. De hecho, esos 4.000 refugiados atendidos por el Consistorio en los últimos años han pernoctado de forma temporal en centros de acogida o albergues municipales. La falta de plazas llevó al Ayuntamiento en abril a acondicionar dos nuevos centros para extranjeros en situación de emergencia que estaban a la espera de que el Ministerio del Interior les diese cita para considerarlos asilados.

Tras recordar que el Ayuntamiento ha donado 4 millones de euros a organizaciones internacionales que trabajan con refugiados, Manuela Carmena se ha mostrado especialmente interesada en que “fructifique” la iniciativa de la Federación Española de Municipios y Provincias (Femp) de coordinar los ofrecimientos de acogida de las distintas poblaciones españolas. ”Nos parece fantástico que se pueda hacer de una forma coordinada”, ha valorado la alcaldesa.

Sobre si Madrid está preparada para acoger en los próximos meses a un número creciente de refugiados en el caso de que haya un cambio en la política estatal de acogida, la alcaldesa ha recordado que en 2016 en Madrid “hubo una solidaridad inmediata” por parte de toda la sociedad madrileña.

”Se generó una ola de solidaridad extraordinaria que se quedó paralizada porque no llegaron los refugiados”, ha recordado la jefa del Gobierno municipal, que cree que ahora “de nuevo” Madrid estaría en la misma situación.

El PP de Madrid valora el gesto pero pide “no engañar”

El portavoz del PP en el Ayuntamiento de Madrid, José Luis Martínez – Almeida, ha considerado que el ofrecimiento de la alcaldesa Manuela Carmena para acoger a un centenar de inmigrantes del Aquarius es un “gesto simbólico importante” pero ha pedido no “engañar” si los recursos sociales están colapsados.

Como Ciudadanos, el concejal del PP ha recordado que el verano pasado refugiados llegados a la capital española fueron trasladados a Guadalajara mientras que en el Palacio de Cibeles colgaba una pancarta que rezaba ‘Welcome Refugees’ y que hace tres meses la delegada de Equidad, Derechos Sociales y Empleo, Marta Higueras, explicó que no se podía acoger a refugiados por que “los recursos sociales en Madrid estaban colapsados”.

Además, el portavoz del PP en la capital ha destacado que en Madrid hay más de 100 asentamientos ilegales con “miles de personas en situación ilegal que están atravesando condiciones paupérrimas desde el punto de vista sanitario y social” que también y que necesitan una solución.