Santa Lucía

¿Qué ocurre cuando el 10% de los alumnos de un instituto son extranjeros? Pues que no hay que desaprovechar la oportunidad de contar con esta torre de babel cultural. En el IES José Zerpa lo saben bien y por eso un proyecto intenta acabar con los estereotipos.

¿Qué ocurre cuando el 10% de los alumnos de un instituto son extranjeros? Pues que no hay que desaprovechar la oportunidad de contar con esta torre de babel cultural. En el IES José Zerpa lo saben bien y por eso un proyecto intenta acabar con los estereotipos.

Vencer a la «gripe del recién llegado». Éste es el primer reto del proyecto de interculturalidad en el que trabaja el Instituto José Zerpa tratando cada día de integrar a las cerca de 25 nacionalidades que conviven en el centro. Y es que, como explica Victoria Hernández, coordinadora de la iniciativa, «hay que ser comprensivo y pensar que dejan su vida, su familia y llegan a un país nuevo donde tienen que empezar desde el principio».

A pesar de todo, Mónica Medina, responsable del grupo de Solidaridad, reconoce que «hay que luchar contra los estereotipos que nacen de lo que oyen en la calle o a sus padres». Victoria añade que la labor del proyecto de interculturalidad «es precisamente demostrarles que lo que les cuentan es sólo una imagen».

prejuicios. Pero no siempre es fácil acabar con las ideas transmitidas de generación y generación. Paqui Vega, vicedirectora, reconoce que hay culturas que lo tienen más difícil que otras. «Los estereotipos contra el pueblo marroquí son los más graves y difíciles de desmontar». Victoria Hernández añade que «los chicos notan que, aunque contra ellos no hay nada, contra su cultura o contra lo que representan sí. Hay un repelús ancestral contra Marruecos». Para luchar contra eso, el centro pide ayuda a los consulados, a los que trata de implicar en esta tarea de concienciación. La semana cultural que celebraron recientemente también es un paso importante. En esta ocasión, el pueblo musulmán estuvo representado con la instalación de una jaima en el aparcamiento, donde se celebró hasta la ceremonia tradicional del té. Otras actividades de esas jornadas dieron a conocer la gastronomía y costumbres de los diferentes países, con charlas y talleres impartidos por los propios padres de alumnos. Por otro lado, casi 40 alumnos de distintas culturas participaron en una obra de teatro de homenaje a la mujer aparcera y se instaló en el centro una tienda solidaria.

Hay otras culturas que, sin embargo, no necesitan tarjeta de presentación. Los profesores del centro reconocen que el alumnado de origen sudamericano es sin duda el mejor integrado en la sociedad canaria. Sin embargo, como explica Victoria Hernández, «aquí también hay distinciones. El carácter cubano es el más abierto de todos, mientras que los ecuatorianos son los latinos más tímidos».

La última de las ideas de este centro en pro de la multiculturalidad tiene un sugerente nombre, batidora de culturas. Es la denominación de un proyecto europeo de intercambio de culturas que el IES José Zerpa quiere desarrollar próximamente con otros centros europeos de Italia, Polonia, Turquía e Inglaterra.

(Foto: canarias7)
(Foto: canarias7)
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(Foto: canarias7)
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