El Ayuntamiento de Molina de Segura y la Fundación Jesús Abandonado han firmado un convenio de colaboración para atender a personas vulnerables. El acuerdo contempla una subvención municipal de 6.500 euros para vecinos en situación de exclusión social, con el objetivo de atender sus necesidades básicas y darles acompañamiento en el proceso de recuperación integral. «Más que dormir y comer, tenemos vocación de servir», remarcó el presidente de la Fundación Jesús Abandonado, José Moreno Espinosa.

El concejal de Bienestar Social, Ángel Navarro, indicó que a través del convenio se da respuesta a las diversas necesidades del colectivo de personas sin hogar en el municipio, que suelen presentar un elevado deterioro de las capacidades físicas y mentales, y con ausencia de apoyo en las redes sociales y familiares. El pasado año la referida fundación atendió a trece personas de Molina de Segura.

La Fundación Patronato Jesús Abandonado asistió en 2017 en el servicio de comedor a 2.295 personas, diferenciadas por sexos en 2.046 hombres y 249 mujeres. El 65% pertenece al colectivo de inmigrantes y la franja de edad de personas atendidas se sitúa entre los 31 y 65 años. «Somos un termómetro de la sociedad y, actualmente, atendemos a más inmigrantes, muchos de ellos llegados en pateras», indicó Moreno.

El convenio de este año introduce como novedad el compromiso de la fundación de tener en cuenta la bolsa de inserción sociolaboral del Ayuntamiento, destinada a favorecer la integración en el mercado laboral de personas en situación de desempleo del municipio.

La alcaldesa, Esther Clavero, remarcó que el acuerdo suscrito sirve para «estrechar lazos» con una entidad que cuenta con una plantilla de 72 trabajadores en el albergue, situado en la carretera de Santa Catalina, y en el centro ubicado en la capital murciana.