La señal de alarma la dieron unas graves quemaduras en la mano izquierda del niño, que habían empeorado al no haber sido tratadas correctamente. Pero, tras un análisis más detallado, se encontraron en el cuerpo del pequeño, de 2 años y totalmente desnutrido, señales susceptibles de indicar un caso de malos tratos. Pilar F. A., de 30 años, madre de cuatro hijos, fue detenida por los Mossos acusada de desatender sus obligaciones familiares con el resultado de lesiones y de un posible maltrato.
La Direcció d’Atenció a la Infància i Adolescència (DGAIA), dependiente de la Generalitat, ha retirado la custodia de sus cuatro hijos, de 6, 3 y 2 años y un bebé de ocho meses. Los especialistas detectaron que, además del niño de dos años, su hermano mayor también presentaba hematomas de golpes antiguos. Mientras el niño de 2 años permanece en el hospital, los otros tres están ya en un centro de acogida.

SOSPECHAS
El martes, la madre, acompañada de su marido, acudió a un Centro de Atención Primaria (CAP) de Sabadell con su hijo porque las quemaduras que se había hecho con una estufa tres semanas antes presentaban muy mal aspecto.
El médico, que inmediatamente constató la gravedad al detectar síntomas de necrosis, instó a los padres a ir al Hospital Parc Taulí de Sabadell. Fuentes de Benestar i Familia informaron de que no acudieron al hospital sino a otro CAP de la ciudad. Allí, según las mismas fuentes, les instaron a acudir al Hospital Vall d’Hebron, que dispone de una unidad específica de quemados. Tampoco fueron.
Uno de los facultativos dio parte al juzgado y a la Direcció General d’Atenció a la Infància, de la Conselleria de Benestar i Família, que, al constatar que no acudían a ningún hospital, decidieron intervenir.
El miércoles por la mañana, una dotación de los Mossos, apoyados por una brigada móvil, fueron a buscar al menor a su domicilio. Inicialmente no lo encontraron pero, al segundo intento, en casa de otro familiar, dieron con él y lo trasladaron al hospital. Los otros tres hermanos fueron trasladados a un centro de acogida. El padre, en el momento de la intervención policial, no estaba en casa.
Fuentes de Benestar i Família informaron de que el caso de esta familia, que ya estaba en manos de los servicios sociales municipales de la capital vallesana, estaba valorado como situación de riesgo.

ABSENTISMO ESCOLAR
De hecho, los asistentes sociales estaban realizando un seguimiento del hijo mayor por un problema de absentismo escolar. Por eso, el ayuntamiento valoró de forma muy positiva la retirada de tutela de la madre al tener indicios de que el funcionamiento familiar no era el adecuado.
Fuentes municipales admitieron ayer que los servicios sociales hacían un seguimiento de la familia, vecina de la calle de Collserola, de Sabadell, pero negaron haber detectado que los menores estuvieran desatendidos.
Los vecinos del barrio La Planada del Pintor donde reside la familia, de etnia gitana, explicaron que en numerosas ocasiones habían denunciado a los padres porque tenían a los niños desatendidos.
Además, añadieron los vecinos, las peleas entre ambos cónyuges eran constantes, especialmente de madrugada.