Cerca de un centenar de personas se han concentrado hoy frente al Ayuntamiento de Móstoles para condenar el racismo y los delitos de odio después de que el actor africano Marius Makon fuese agredido este domingo cuando se encontraba en una cervecería del municipio.

“Cuando una persona te dice ‘negro de mierda, vete a tu país’, eso ya es racismo, y esta mujer lo dijo, pero lo que más me dolió fue cuando me dijo ‘soy blanca, te puedo matar y no pasa nada’. A esa chica hay que salvarla”, ha señalado el actor agredido, que ha protagonizado el acto de repulsa organizado en Móstoles.

Los hechos, que han sido denunciados por el propio agredido y han sido llevados a la fiscalía por la Red Española de Inmigración y Ayuda al Refugiado, ocurrieron alrededor de 7.30 horas del domingo cuando el actor se acercó a la barra de una cervecería de Móstoles en compañía de sus amigos para pedir una consumición.

Según la denuncia, en ese momento, una mujer de entre 30 y 34 años le abordó y le dijo “no quiero negros en el local ni delante mío”, al tiempo que afirmó que podía “matarlo y no me pasaría nada porque soy blanca”.

Pese a que el actor hizo caso omiso, la mujer volvió a insultarle y, agarrando una botella de cerveza de la barra, la estrelló contra la cabeza del actor propinándole un segundo golpe que le provocó brechas y heridas de diversa consideración.

Inmediatamente, los propietarios del establecimiento llamaron a los cuerpos y fuerzas de seguridad que se personaron en el local y recomendaron al agredido que presentara una denuncia contra la mujer.

Makon, que ha agradecido el apoyo de los vecinos concentrados y del propio Consistorio, ha manifestado que es “el pueblo” el que tiene que conseguir “aislar a todos los racistas, a todos los que creen que son más que los demás, o más españoles que los demás”, para que “la convivencia sea sana”.

“Este es mi país, por eso llevo esta bandera. No hay ninguna persona aquí que me diga que es más español que yo, porque eso es mentira. Ser español es tener un sentimiento de pertenecer a un sitio, va más allá del color de piel”, ha insistido el actor, quien dice que su padre le enseñó a “respetar y amar” a España.

Makon ha narrado como sus padres vinieron a España, dejando su país y “encontrando la paz aquí”, y cómo él ha podido estudiar “en los mejores colegios de España, en la Universidad, incluso mucho mejor que algunos blancos”, por lo que ha reiterado que “el racismo es un problema de cada uno”.

“Mi hija es española, ha nacido aquí, y lo único que le digo es que tiene que amar su país, respetar las leyes, porque hay una Constitución del 78 que te protege”, ha añadido el actor de origen africano, quien dice enseñar a su hija a fijarse “en la gente que hace las cosas bien, no en el color de su piel”.

Para Makon, la mujer que le agredió -una mujer de 33 años oriunda de El Salvador, “no sabía” y “no se da cuenta” de la existencia de la ley, por lo que considera que “necesita cariño” y que, “de verdad, la perdona”, a pesar de que “no quiere restar importancia al asunto”.

“Yo soy negro, pero mi alma va por encima del color de mi piel, tengo un alma que es de ser humano, como ella”, ha recalcado el actor, quien ha estado acompañado de varios miembros de la Red Madrileña de Inmigración y Ayuda al refugiado, así como el director del Servicio Jurídico de esta organización, Estanislao Naranjo.

Naranjo ha explicado que han presentado una denuncia ante la Fiscalía entendiendo que “existe un delito de lesiones con agravante específica en relación al odio, establecido en el Código Penal”, ya que la agresión “se hace en función de su carácter racial” como se percibe “en los insultos que se le producen en el momento en el que es atacado”.

Sin embargo, fuentes policiales han indicado a Efe que no consideran que la agresión al actor africano pueda ser tipificada como delito de odio, sino como un altercado en el que la agresora, en evidente estado de embriaguez y que cuenta con antecedentes similares, estalló una botella de cerveza en la cabeza del hombre.

Al ser preguntado por este extremo, el director del Servicio Jurídico de la Red Madrileña de Inmigración y Ayuda al refugiado ha dicho que la policía “no tiene facultades” para hacer la calificación jurídica y que el atestado “simplemente recoge los hechos y los manda al Juzgado, por lo que es irrelevante”.

También han acompañado a Makon varios representantes municipales, con la alcaldesa de Móstoles, Noelia Posse (PSOE), al frente, quien ha dejado claro que “Móstoles es una ciudad abierta, tolerante” y que están “muy indignados por lo que ha sucedido”, por lo que condenan “todo tipo de violencia, la ejerza quien la ejerza”.

Por su parte, el concejal de Cultura Bienestar y Vivienda, Gabriel Ortega, ha explicado que la concentración es consecuencia de la “alarma y preocupación” que les produjo “la agresión racista” producida en la ciudad y para que “la impresión que se llevó Makon de la localidad, no sea la que le quede en la retina”.