La magistrada ha emitido un auto de transformación de procedimiento abreviado que entiende que las denuncias pueden ser constitutivas de un delito de maltrato habitual, dos delitos de amenazas, un delito de maltrato psicológico, dos delitos de lesiones y un delito de coacciones en el ámbito familiar. El auto detalla que, durante la relación entre ambos, el presunto agresor la atentó de forma continuada con expresiones tales como «inmigrante de mierda, eres una muerta de hambre, no vales nada, todo es mío».

En diciembre de 2014 el investigado presuntamente y según el auto, se dirigió a su pareja con expresiones humillantes y, en un momento dado, la tiró al suelo dándole patadas y poniéndole la cara fuertemente contra el césped dañándole un ojo.

En enero de 2015, le dijo «eres una mierda pinchada en un palo, vives en mi casa», para a continuación, cogerla por el cuello y tirarla al sofá. En marzo del mismo año, encontrándose en un asadero, comenzó presuntamente a dirigirse a ella de forma despectiva, la sacudió y la lanzó contra un mueble de cocina. Mientras, en julio de 2015 comenzó a gritarle según el auto judicial «vete de mi casa, te voy a escachar la cabeza. Voy a pagar a un rumano para que, por 3.000 euros, te mate, que cuando te localicen estarás fuera de la isla; te meto en un barco y no quedan pruebas». Sigue el escrito detallando que en julio de 2015, el denunciado le dijo «te cojo y te reviento la cabeza con la silla, muerta de hambre, te cojo y te reviento. Soy abogado. Tú sin mí eres una muerta de hambre. Eres una mierda, no te vas a ir». En ese momento llegó la policía y manifestó «al perro que muerde la mano del amo, es cuestión de amarrarlo y tirarlo a un estanque», dijo presuntamente.

Las partes ahora tienen un plazo para realizar sus escritos de acusación y defensa y así, se pueda decretar el auto de apertura del juicio oral.