ERENA CALVO

SANTA CRUZ. Representantes del Sindicato Unificado de la Policía (SUP) en la isla de Tenerife denunciaron ayer en declaraciones a este periódico la situación de «peligro» a la que se están enfrentando los agentes que custodian a los inmigramtes en la Comisaría del Sur, ya que «algunos de ellos podrían padecer sarna, sida, o tuberculosis». Una situación que, aseguraron, se reproduce también en la isla de Gran Canaria.

El «riesgo» es «inminente», por lo que desde el SUP se recomienda a los funcionarios del Cuerpo que tratan con los indocumentados que adopten las actuaciones establecidas en la normativa si no se les informa de modo veraz de su estado de salud. En caso contrario, señalaron las mismas fuentes, «habría que optar por el absentismo laboral al menor síntoma».

Desde el SUP también se criticó el hacinamiento que soporta la Comisaría, que con una capacidad para veinte personas tiene internados a 126 inmigrantes hasta que puedan ser derivados al centro de internamiento de Hoya Fría, o al acuartelamiento de Las Raíces, habilitado temporalmente por el Gobierno central para alojar a los inmigrantes. Lo más «sangrante», sin embargo, es que «hayan permitido que los últimos 44 irregulares que llegaron a la isla este lunes permanezcan en el garaje» de las dependencias policiales, que tiene «entre 30 y 40 metros cuadrados». Un espacio «que además no cuenta con las mínimas condiciones de higiene para que estas personas estén alojadas dignamente».

Ante esta coyuntura, el sindicato ha elevado las quejas pertinentes ante el Jefe Superior de Policía y el comisario provincial, solicitando que los agentes que han tenido contacto con los indocumentados «puedan pasar un reconocimiento médico» para descartar que hayan sido contagiados, y que los inmigrantes puedan pasar el período de custodia en el centro de internamiento, «donde pueden estar mucho mejor atendidos que en un garaje». «De hecho,voluntarios de la Cruz Roja acuden dos veces por día a los centros para atender a los indocumentados. No son sus únicas reclamaciones, también dejaron claro que necesitan más medios para protegerse de contagios, y que se desinfecten con regularidad las mantas que emplean los inmigrantes.

Por su parte, el jefe del Servicio de Epidemiología del Gobierno de Canarias, Domingo Núñez, reconoció en declaraciones a Efe que durante los últimos días se detectaron dos casos de inmigrantes que llegaron con sarna, pero explicó que han recibido tratamiento y que han dejado de ser trasmisores del ácaro que la produce. Núñez consideró «obvio» que entre los inmigrantes que llegan de forma ilegal algunos tengan infecciones, pero destacó que cuando los servicios médicos tienen sospechas derivan a los posibles enfermos a los servicios correspondientes.

«No fueron tratados hasta el martes»

Los representantes del SUP, sin embargo, apuntaron que los inmigrantes que supuestamente estarían afectados de sarna no fueron tratados hasta el martes, y no han sido derivados a ningún hospital. «Sólo se les puso aparte como medida preventiva». «Parece que ahora se está sacudiendo todo el mundo las plumas porque desde el lunes se determinó que tenían sarna». «En dos o tres horas que estuvieron en Urgencias los inmigrantes supuestamente infectados no sé si se podrá atajar totalmente la situación, pero lo cierto es que les mandaron una crema para tratarse por si acaso que tampoco han venido los sanitarios para aplicársela».