«El principal objetivo es evitar que estas personas que llegan en condiciones precarias queden en situación de calle. Muchas de ellas están de tránsito en Murcia y su destino final es Francia», dijo el pasado día 9 la responsable de Derechos Sociales en el Ayuntamiento de Murcia, Conchita Ruiz Caballero. Lo hizo con motivo de una reunión en la que se acordó intensificar el trabajo con las entidades que trabajan en la atención y acogida de refugiados, solicitantes de asilo y personas en situación irregular, ante la oleada de pateras en las costas de la Región. Con sus palabras, Ruiz puso el foco en una situación que, en Cartagena, se concreta en que grupos de inmigrantes han sido sorprendidos por la Policía Local y la Guardia Civil con billetes de autobús con destino San Sebastián. Según fuentes policiales, en la antepenúltima oleada de embarcaciones cinco argelinos y un marroquí, que no portaban encima documentación sobre su identidad, fueron pillados en La Manga con los citados billetes, que cuestan casi 50 euros. Su intención era salir en unas horas de la estación de autobuses de Cartagena, cuyos responsables avisaron también a la Comisaría al extrañarle la compra de muchos tiques para ir a la capital guipuzcoana. Ni la Benemérita, ni el Ministerio del Interior dieron información sobre este asunto y su posible conexión con mafias que facilitarían la llegada a Francia y Bélgica.