La policía búlgara ha desarticulado un grupo organizado dedicado al tráfico de inmigrantes desde Turquía a Austria a través del territorio del país balcánico, informó hoy el Ministerio del Interior de Bulgaria.

Ocho personas seis búlgaros y dos pakistaníes han sido detenidas en el marco de una operación desarrollada ayer por agentes especializados en la lucha contra el crimen organizado, la Policía de fronteras y la Agencia Estatal de Seguridad Nacional, los servicios de contraespionaje.

“Las evidencias reunidas hasta el momento indican que a diferencia de la mayoría de las estructuras de tráfico de inmigrantes, este grupo organizaba el traslado de personas no solamente a través del territorio de Bulgaria sino hasta el destino final de su viaje”, subraya un comunicado del ministerio.

El precio exigido para ir de Turquía a Austria era entre 4.000 y 6.000 euros y entre 600 y 1.000 si se hacía el traslado solamente hasta Rumanía.

Las autoridades no han dado datos del numeros de personas que transportaron los supuestos traficantes ni cuánto tiempo estuvieron en activo.

Según las investigaciones, los dos ciudadanos pakistaníes tenían asignada la tarea de buscar en Turquía a posibles candidatos para el viaje, en su mayoría afganos, pakistaníes e iraquíes.

Los otros miembros del grupo se encargaban de recoger a los inmigrantes al otro lado de la frontera, en Bulgaria, y una vez en el país los transportaban y alojaban en distintos pisos situados en Sofía, o en las ciudades de Vidin y Lom, a orillas del Danubio y en la frontera con Rumanía.

Desde allí organizaban el cruce del río con botes alquilados a pescadores y los transportaban hasta la frontera húngara, donde continuaban su viaje en coche hasta Austria.