La primera ministra de Bangladesh, Sheikh Hasina, ha pedido durante una llamada telefónica la colaboración del secretario general de la ONU, António Guterres, para que Birmania (Myanmar) acepte repatriar a casi 600.000 rohinyás llegados a territorio bangladesí en las últimas semanas.

“Nuestra primera ministra ha urgido al secretario general de la ONU a que ponga más presión sobre el Gobierno de Birmania para acoger de vuelta a sus nacionales desde Bangladesh”, dijo hoy a Efe el secretario de prensa de Hasina, Ihsanul Karim.

Guterres llamó anoche a la dirigente bangladesí para tratar el éxodo de esta minoría musulmana y ésta aprovechó para pedir, además, la implementación de las propuestas presentadas el mes pasado durante la Asamblea General de la ONU en Nueva York, agregó la fuente.

Guterres, por su parte, expresó su preocupación por la llegada masiva de rohinyás a suelo bangladesí y agradeció a Dacca sus esfuerzos por acogerles y proveerles de ayuda humanitaria, detalló Karim.

La crisis de los rohinyás comenzó el pasado 25 de agosto, tras un ataque de un grupo insurgente de esta comunidad musulmana contra instalaciones policiales y militares en el estado occidental birmano de Rakhine, una acción que fue respondida por el Ejército con una campaña que aún continúa.

Birmania no reconoce a los rohinyás como una comunidad de ese país y los considera bangladeshíes, mientras que Bangladesh, donde ya antes de esta crisis vivían unos 300.000 miembros de esta minoría, los ha tratado siempre como extranjeros.