97 menores no acompañados han llegado en patera a las costas de la Región desde principios de mes, con lo que son ya más de 200 los niños y adolescentes inmigrantes acogidos y tutelados por la Comunidad – la administración competente para ello – desde principios de año. La oleada de pateras no cesa, lo que ha puesto a prueba la capacidad de los centros. La Consejería de Familia e Igualdad ha tenido que ir ampliando a toda prisa el número de plazas. Se han cerrado acuerdos con organizaciones sociales, como Diagrama, y se ha habilitado de urgencia la residencia El Peñasco, en Mazarrón.

La consejera de Familia, Violante Tomás, subrayó ayer que «absolutamente todos los menores no acompañados» que están llegando en patera están siendo atendidos en estos centros de acogida bajo la tutela de la Comunidad. «Estamos muy bien coordinados con la Policía Nacional y con el Instituto de Medicina Legal, ya que son los forenses quienes elaboran el informe para confirmar que se trata de menores», explicó la consejera.

Convivir sin Racismo denuncia el colapso de la red de acogida de la Comunidad. «El centro La Cueva, en Monteagudo, tiene 12 plazas y ha llegado a soportar picos de 40 personas. Después se ha abierto a toda prisa El Peñasco, que es una residencia vacacional, y también se ha quedado pequeña», advierte Juan Guirado, portavoz de esta asociación.

La reciente oleada de pateras ha desbordado la capacidad de las organizaciones sociales para atender a los inmigrantes, una situación de la que se hizo eco ayer ‘La Verdad’. Ante la falta de plazas, muchos inmigrantes, en principio mayores de edad, están durmiendo en Jesús Abandonado o directamente en la calle.