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BARCELONA. El Departamento de Bienestar y Familia ha puesto en marcha un servicio de información a través del 012, el teléfono de Atención Ciudadana de la Generalitat, en el que se responderá cualquier cuestión relacionada con la inmigración.

Este nuevo servicio telefónico, dirigido tanto a población autóctona como a la recién llegada, dará respuesta a dudas jurídicas sobre extranjería, así como a aspectos sobre empadronamiento, acceso al sistema sanitario o educativo, asociacionismo o cursos de lengua, entre otros asuntos relacionados con la acogida y la integración de los inmigrantes en Cataluña. La consellera de Bienestar y Familia, Anna Simó, y la secretaria de Inmigración, Adela Ros, presentaron ayer el servicio, destinado a paliar el «déficit» de información que existe en este ámbito, del que es competente el Gobierno, para «evitar que se generen situaciones de desigualdad y discriminación».

Dos personas especialmente formadas y con dominio de catalán, castellano, árabe e inglés atenderán las preguntas de los ciudadanos que llamen al 012 Inmigración, que funcionará de lunes a viernes de 9 a 17.00 horas, aunque, según el volumen de consultas, podrían ampliarse los horarios y las lenguas de atención. Los requisitos de entrada en España, dónde obtener asesoramiento jurídico gratuito, cómo reagrupar a los miembros de una familia o cuánto tiempo se puede permanecer fuera de España sin perder la residencia son algunas de las preguntas que se podrán responder en este servicio.

Adela Ros precisó que el nuevo servicio es «tanto de información como de derivación», ya que se indica a los usuarios dónde han de dirigirse para realizar los trámites necesarios u obtener más información, sea la Delegación del Gobierno, un municipio, un departamento de la Generalitat o incluso el Síndic de Greuges.

En este sentido, Anna Simó subrayó que el 012 «no sirve para resolver expedientes, sino para responder preguntas», y añadió que se espera que el servicio tenga una amplia acogida, ya que «en la Cataluña de 7 millones de personas, un 12 por ciento de los empadronados son extranjeros».