La policía mauritana cierra el paso

El país africano interceptó ayer una barca con 70 personas y detuvo a otras 54

La Vanguardia, 17-03-2006

El control de la policía mauritana empieza a cerrar el paso a la salida de barcas, aunque en Canarias todavía se espera la llegada de las que salieron hace dos o tres días.

JOSÉ BEJARANO – 17/03/2006
Nuadibú

Moratinos dijo que esta crisis puede llevar a una reflexión más profunda del papel que debe tener España en África

Gestos de buena voluntad por ambas partes. Mauritania aumentó ayer, en la medida de sus posibilidades, las fuerzas de seguridad en la zona de Nuadibú, desde donde salen ahora la mayoría de las pateras rumbo a Canarias. Ayer fue interceptada por la Marina mauritana una de esas barquillas con alrededor de 70 personas dentro, que fueron obligadas a regresar a Nuadibú. La policía del país africano también detuvo ayer a 54 inmigrantes en el litoral de Nuadibú con lo que en dos días el número de detenidos se eleva a 178. Era la contrapartida al compromiso de España de facilitarle apoyo técnico y financiero para el control de la inmigración. Aunque la reunión ayer de dos secretarios de Estado (Exteriores e Interior) con el primer ministro del país subsahariano tuvo más carácter político que técnico. Una aproximación política para ver qué espera cada parte.

Mientras, alrededor de 10.000 (cualquier cifra es una hipótesis) subsaharianos se esconden en las proximidades de Nuadibú. Ahora con más razón que nunca porque ayer estuvieron en la ciudad las máximas autoridades del país. Extremaron el celo profesional las fuerzas de seguridad, algo que es relativo en unos profesionales mal pagados y sin medios técnicos adecuados.

A atacar esa situación parece encaminarse la mayoría de las propuestas del jefe de la junta militar de Mauritania, Ely Uld Mohamed Vall, que pidió a la delegación española ordenadores, emisoras de radio, vehículos y patrulleras. También entrenamiento para su personal. La respuesta de los secretarios de Estado de Exteriores, Bernardino León, e Interior, Antonio Camacho, fue que la envergadura del problema supera el ámbito de las relaciones bilaterales. El representante de la UE presente en la reunión tomó buena nota. Algunas actuaciones podrán inscribirse en los programas de cooperación, pero la mayoría precisa partidas específicas en los presupuestos europeos. Ya sucedió en otoño con Marruecos después de la crisis de las fronteras de Ceuta y Melilla. Sin que nadie lo explicitara en forma de cifras económicas, de fondo estaba el modelo de ayuda que recibió Rabat. Quizás no de la misma cuantía.

El ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, afirmó ayer que Mauritania tiene “plena disposición” a cooperar con España en esta crisis, después de haber mantenido una conversación telefónica con el presidente mauritano, el coronel Ely Uld Mohamed Vall. El jefe de la diplomacia mostró desde Asturias su confianza en obtener una “solución satisfactoria” con el Gobierno de Mauritania para frenar el flujo de inmigrantes que están llegando Canarias. En este sentido, subrayó la “tragedia humana” que está viviendo este país y confió en los resultados de la delegación española.

El titular de la cartera de Exteriores mantuvo una conversación con Ely Uld Mohamed Vall en la que este último le expresó su “plena disposición a cooperar y tratar de hacer frente a esta situación”. Por ello, aseguró que se encontrará “un proceso de solución que será satisfactorio” para ambos países. Moratinos reconoció que la actual crisis migratoria proveniente por primera vez de Mauritania puede llevar a una “reflexión y estrategia más profunda” de lo que puede ser la política española hacia África.

Por su parte, el comisario de Seguridad, Libertad y Justicia europeo, Franco Frattini, lamentó ayer la situación que se está registrando en Mauritania. “Lo único que se puede hacer es persuadir a los países de origen y de tránsito de que deben acoger de nuevo a esas personas” y reforzar los programas de ayuda al desarrollo a medio y largo plazo, dijo Frattini en declaraciones recogidas por la agencia Efe. El comisario europeo reconoció la limitada acción que hay para paliar esta situación, que vuelve a poner de manifiesto que no se trata de un hecho aislado, sino de un problema continuo que se traslada de emplazamiento geográfico.

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