soraluze – “Recojo este premio en nombre de todas las mujeres que no estan aquí porque han sido asesinadas. Es una bofetada al machismo”.

Sin poder contener las lágrimas, esas fueron las primeras palabras que acertó a pronunciar la eibarresa Nerea del Campo Aguirre cuando subió al escenario del cine de Soraluze para recoger el premio Gure Balioak 2016, un galardón que por séptimo año consecutivo concede la agencia de desarrollo comarcal Debegesa con el objetivo de reconocer a personas o entidades de Debabarrena distinguidas por su labor en el ámbito de los valores sociales.

Tras recibir el premio de manos del alcalde de Soraluze, Iker Aldazabal, la impulsora de la asociación Mujeres al Cuadrado que atiende en Eibar a las mujeres que sufren malos tratos y promotora de las clases de Empalabramiento que se imparten en la ciudad armera para enseñar castellano a las mujeres inmigrantes, reivindicó “el derecho de todas las mujeres a poder vivir sin miedo”.

Además, quiso dejar bien claro que, para ella, las mujeres que sufren malos tratos y la violencia machista “no son víctimas sino supervivientes, porque las víctimas son las que no lo pueden contar”. Por eso, y por su propia experiencia, aprovechó la ocasión para lanzar un mensaje a todas las mujeres que padecen maltrato en el ámbito doméstico: “de la violencia machista se sale y yo soy el mejor ejemplo”.

Visiblemente emocionada y “muy agradecida” por un reconocimiento que “nunca hubiera podido ni imaginar” por una labor que realiza “muy a gusto” y que espera poder seguir desempeñando “muchos años más”, la galardonada con el premio Gure Balioak 2016 acudió a la ceremonia para la entrega del galardón arropada por sus padres, por su hijo y por varias de las mujeres de origen extranjero que asisten a sus clases de español.

Todas ellas coincidieron al señalar lo “merecido” del premio entregado a Nerea; lo mismo que el jurado, que quiso destacar “la iniciativa, la valentía y el espíritu de superación” de la galardonada, “al ser capaz de asumir y transformar una dura situación personal en un proyecto de solidaridad y compromiso social con las mujeres que sufren violencia de género”.

El jurado también quiso destacar “su papel activo y su empeño en visibilizar la realidad de las mujeres maltratadas, no como víctimas sino como supervivientes empoderadas y capaces de enfrentar un nuevo futuro libre de violencia”.

Por lo demás, el acto para la entrega del premio a los valores sociales de Debabarrena incluyó la charla titulada La igualdad es más, que corrió a cargo del técnico de Emakunde y coordinador de la iniciativa Gizonduz, Ander Bergara; así como una breve actuación del coro infantil de la Escuela de Música de Soraluze, que interpretó dos canciones para abrir y cerrar un evento al que asistieron más de un centenar de personas.