El ministro de Exteriores de Austria, Sebastian Kurz, ha asegurado que su país votará en contra de la apertura de nuevos capítulos en la negociación de Turquía para ser miembro de la Unión Europea (UE).

«Tengo voz y voto en el Consejo de Ministros de Exteriores (de la UE, donde las medidas tienen que ser acordadas por unanimidad). Ahí se decidirá si se abren nuevos capítulos con Turquía. Y yo estoy en contra», declaró el ministro en una entrevista que publica hoy el diario Kurier.

Kurz aseguró, como ha dicho en numerosas ocasiones, que el acuerdo migratorio con Turquía está condenado al fracaso y que la UE debe defender sus fronteras por sí misma y no delegar esa función en terceros países. Al delegar esa función en Turquía «se cae en una dependencia y, al final, uno se vuelve chantajeable», criticó.

En el acuerdo migratorio con Ankara, Turquía acepta la readmisión de inmigrantes que llegan a las islas griegas a cambio de incentivos políticos y económicos. En ese pacto se incluye la exención de visado para ciudadanos turcos a la hora de viajar a la UE, la entrega de miles de millones de euros a Turquía y acelerar las negociaciones de adhesión con la UE.

Recientemente Ankara ha asegurado que «se distanciará» del acuerdo si sus ciudadanos no obtienen en octubre la exención de visados, para lo que aún tiene que cumplir varios requisitos.

El cruce de reproches entre Austria y Turquía ha subido de tono en la última semana y el viernes pasado el ministro de Exteriores turco, Mevlüt Çavusoglu, calificó a Viena como la «capital del racismo radical», al valorar las declaraciones del canciller austríaco, Christian Kern. Kern dijo que la adhesión de Turquía a la UE es una «ficción diplomática» y aseguró que pedirá en el próxima reunion de jefes de Estado que se cancelen las negociaciones.

Viena ha acusado a Ankara de incitar las protestas a favor del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, en Austria que se produjeron tras el fallido golpe de estado del 15 de julio y en las que se registraron algunos actos violentos.