Ha tenido una vida muy corta pero llena de incidencias. Una niña de tan sólo dos semanas ha muerto este martes en un accidente de tráfico en Cebolla (Toledo) al chocar el vehículo en el que viajaba con un camión.

La niña, de origen rumano, viajaba en compañía de dos mujeres en un monovolumen. Había nacido el pasado 13 de marzo en las puertas del hospital Nuestra Señora del Prado de Talavera de la Reina (Toledo), donde el coordinador del servicio de urgencias fue el encargado de salir del centro y cortar el cordón umbilical en el interior del coche del padre, que acabó agradeciendo el trabajo del facultativo con un fuerte abrazo al finalizar el alumbramiento.

“Es una niña preciosa”, dijo ese día el coordinador de urgencias, el doctor Ricardo Juárez, con 34 años de experiencia, después de atender con éxito a la madre y a la recién nacida en el automóvil del padre.

No respetó el stop

Quince días después de aquel nacimiento accidentado la niña ha muerto en un siniestro ocurrido en el kilómetro 46 de la carretera CM – 4000, muy cerca del municipio de Cebolla. Al parecer, el coche en el que viajaba se ha saltado una señal de stop y ha acabado siendo arrollado por un camión en una colisión frontolateral. El conductor de este último vehículo ha resultado ileso y las dos mujeres han tenido que ser excarceladas del interior del coche por los bomberos del parque de Santa Olalla (Toledo). Una de ellas, de 40 años, ha sido evacuada en un helicóptero sanitario al hospital Virgen de la Salud de Toledo en estado muy grave mientras que la otra, de 50, ha sido enviada al hospital de Talavera de la Reina en una ambulancia. Los bomberos han encontrado en el interior del coche una silla de bebé, por lo que se investiga si ha podido fallar el mecanismo de retención o bien la pequeña no iba debidamente sujeta.

La familia de la pequeña reside en Malpica de Tajo (Toledo) donde el Ayuntamiento ha decretado dos días de luto oficial.