almería – Un centenar de efectivos de la Guardia Civil permanecen en Roquetas de Mar, cerca de la calle en la que el viernes fue encontrado muerto un varón de 41 años, de Guinea Bissau, apuñalado durante una discusión de tráfico, para velar por la seguridad tras los altercados registrados tras el suceso. Así lo indicó a los medios el coronel Francisco Jiménez, de la Comandancia de Almería, durante una visita al lugar, vigilado por un dispositivo en el que participan agentes de la provincia y de los Grupos de Reserva y Seguridad (GRS) de la Guardia Civil procedentes de Sevilla y Valencia, que en breve recibirán refuerzos de Madrid.

Fuentes de la Subdelegación del Gobierno de Almería afirmaron que la víctima presentaba una única herida de arma blanca en el abdomen y que, tras los hechos, hubo alteraciones del orden público en la zona. Pero los altercados, que comenzaron sobre las siete de la tarde de ayer, con “fuegos incontrolados” en contenedores y otros puntos de la localidad, cesaron al caer la noche, según apuntaron fuentes del instituto armado y vecinos del barrio.

El fallecido fue agredido por una o más personas de etnia gitana, según señaló la Subdelegación del Gobierno. Por ello se estableció rápidamente un cordón policial para evitar enfrentamientos entre inmigrantes subsaharianos y los vecinos de este barrio, donde viven muchos gitanos.

Ayer por la mañana eran muchos los miembros de esta etnia los que abandonaban sus viviendas, ya que, según afirmó uno de ellos, la Guardia Civil les recomendó que se fueran unos días a casa de familiares.

El subdelegado del Gobierno en Almería, Andrés García Lorca, aseguró que, ayer, la situación en el barrio de Cortijos de Marín, donde tuvieron lugar los altercados, es de “absoluta normalidad”, aunque se mantiene la vigilancia policial ante posibles “rebrotes”.

En este sentido, el subdelegado afirmó que se mantiene la vigilancia en las viviendas de familias de etnia gitana y que ahora sólo están “pensando en darle sepultura o en repatriar el cadáver del ciudadano de Guinea Bissau”.

Además, informó de que no se ha detenido a ninguna persona relacionada con el homicidio, así como que no se ha arrestado a ningún participante en unos disturbios que “fueron mínimos para una población de 3.000 subsaharianos”, y añadió que “no participarían ni treinta personas, menos del 1%” – Efe