“Los judíos lo pasaron fatal en los campos de concentración, pero el holocausto tiene una explicación política”, tuiteó en 2014 Marta Rivera de la Cruz, número tres por Madrid de Ciudadanos, miembro de su Ejecutiva y coordinadora de su programa de cultura. Su mensaje era una contestación a una afirmación de Pablo Iglesias (“El terrorismo de ETA tiene bases políticas”), a lo que ella respondió con dos tuits, el ya mencionado y otro: “Sí, ETA tiene una base política. También la tenía el holocausto, y me parecería una canallada recordárselo a un judío”. El tuit ha vuelto a salir a la luz, y ha sacudido las redes sociales, unas horas después de que Rivera de la Cruz haya participado en el debate a 9 que la televisión pública emitió este miércoles por la noche. La escritora asegura que con este mensaje de Twitter intentaba demostrar precisamente el shock que causaría decir lo mismo que había dicho Iglesias de ETA en el caso del Holocausto.

Ciudadanos decidirá en las próximas horas si la afirmación que hizo Rivera de la Cruz en 2014 es punible según su reglamento interno. Un miembro de la Ejecutiva de Ciudadanos ha asegurado sobre el primer mensaje de los dos que Rivera de la Cruz colgó en las redes sociales que pedirán información “sobre el contexto en el que se produjo ese tuit, sobre si es aislado o forma parte de una cadena”. En el caso de que fuera aislado, ha considerado que tendría “una pinta fatal”.

“Pablo Iglesias acababa de decir delante de víctimas de ETA que condenaba el terrorismo de ETA pero que tenía base política. Evidentemente, todos los genocidios y exterminios tienen una explicación política, pero esta no se puede buscar y sobre todo no se puede esgrimir delante de una víctima”, ha explicado Rivera de la Cruz esta mañana a EL PAÍS. “[El tuit] era una forma de llevar esto al horror. El siguiente tuit aclara más: eso no se lo puedes decir a un judío”, ha añadido la escritora, autora de un libro en el que el protagonista es un judío victima del nazismo. La propia Rivera también defendió en el debate a nueve del miércoles la propuesta de Ciudadanos de quitar la agravante penal por violencia de género. Usó este argumento: “Es tan grave que un niño vea cómo su padre mata a su madre, que que un niño vea como su madre mata a su padre”.

Este verano, Ciudadanos pidió la dimisión de Guillermo Zapata, entonces concejal de cultura del Ayuntamiento de Madrid con Ahora Madrid (Podemos), por unos tuits en los que se burlaba de los judíos —"¿Cómo meterías a cinco millones de judíos en un 600? En el cenicero"—, y de Irene Villa, víctima de ETA —"Han tenido que cerrar el cementerio de Alcásser para que Irene Villa no vaya a por repuestos"—. Begoña Villacís, portavoz de la formación de Albert Rivera en el consistorio esgrimió que le preocupaban esos mensajes “de carácter racista”. “Si no son permisibles fuera del Ayuntamiento comentarios intolerantes, racistas o que denoten odio, mucho menos dentro del Consistorio”, argumentó.

Esta misma semana, un cargo de Ciudadanos ha tenido que dimitir por comentarios escritos en esta red social. Se trata de Sergio Luna, concejal de Soto del Real, en Madrid, al que previamente el partido le abrió expediente por exaltar a Primo de Rivera en unos comentarios de 2011. Rivera advirtió en público a este representante, y a cualquier otro afectado por tuits similares, de que el partido no toleraría declaraciones que no estuvieran en consonancia con la carta ética que deben firmar todos los candidatos de Ciudadanos. Marta Rivera de la Cruz también ha firmado ese documento.