Un cruce de miradas en la calle, en la frutería o en la carnicería o un agur en el ascensor. La mayoría de ocasiones la relación no llega más allá entre personas extranjeras y autóctonas. Precisamente, para ello, para «fomentar la convivencia entre personas de diferente origen», Arrasate y el Alto Deba se vuelven a sumar un año más a la iniciativa Bizilagunak de SOS Racismo. Lo harán el próximo domingo, 22 de noviembre, «compartiendo amistad y gastronomía».

¿Qué es? Trata de una comida entre familias autóctonas y extranjeras.

Objetivo. Fomentar la convivencia entre personas de diferente órigen.

Inscripción. Último día mañana escribiendo a sosracismobizilagunak@gmail.com o llamando al 943 32 18 11.

Elkarhezitzen, entidad que agrupa cinco ONGs locales: Hiruatx, Harreman, Anelkar, AMS Mundo Solidario y Serso San Viator, es la encargada de la organización de esta jornada ‘gastro – cultural’. Como recuerdan desde Elkarhezitzen Bizilagunak, se estrenó en el Alto Deba hace ya tres años con una primera experiencia en el municipio de Aretxabaleta, donde tuvo lugar una comida de hermandad celebrada en una sociedad gastronómica con una treintena de comensales, entre ellos 15 inmigrantes.

Segundo año en Arrasate

La experiencia recaló en Arrasate el pasado año con la participación como anfitriones de una familia mixta vasco – colombiana, que invitó a unos paquistaníes; dos parejas vascas que invitaron a saharauis; un grupo de amigos vasco – argentino – mexicanos, que comieron junto a una amiga marroquí, y una cuadrilla local que convidó a su sociedad a varias familias nepalíes.

La experiencia, según señalan, fue «muy positiva» por lo que este año Elkarhezitzen y Ekin Emakumeak, organizadores del programa en Arrasate, cuentan con que la participación iguale o supere a la registrada en 2014. Para ello, mantienen abierta la inscripción, tanto para anfitriones como para invitados, hasta mañana 16 de noviembre, en la dirección electrónica sosracismobizilagunak@gmail.com y en el número de teléfono 943 321811.

Para ‘engrasar’ los encuentros, la organización envía un dinamizador a cada una de estas citas al objeto de intermediar, hacer las presentaciones y estimular el entendimiento entre anfitriones e invitados. Según Maitane Igartua, de Elkarhezitzen, varios de los participantes de la edición del año pasado se han inscrito para repetir la experiencia, entre ellos los amigos vasco – argentino – mexicanos y la familia vasco – colombiana. También hay inscritas personas individuales que la organización junta para arreglar encuentros en grupo.