La presidenta del Parlamento apela al consenso ante la inmigración

Diario de Navarra, EFE. PAMPLONA, 03-11-2015

Ainhoa Aznárez ha abogado por aunar voluntades políticas para dar una respuesta adecuada desde la perspectiva de género al drama de la inmigración y los refugiados
La presidenta del Parlamento de Navarra, Ainhoa Aznárez, ha abogado este martes por aunar voluntades políticas para dar posibles para dar una respuesta adecuada, también desde la perspectiva de género, al drama de la inmigración y los refugiados que llegan a Europa huyendo del hambre, la guerra y la miseria.
“Estamos ante un tema muy social, que trasciende el Derecho y nos sitúa ante la tesitura de reducir la inmigración a una simple cuestión de integración o, yendo un poco más allá, fomentar una convivencia integral”, ha dicho.
Aznárez, que ha presidido la apertura de la VXI Aula de Derechos Parlamentario dedicada a los derechos de los inmigrantes, ha apostado también por una “mirada de género” que tenga en cuenta el “coste adicional” que, “como en muchos otros ámbitos”, entraña para las mujeres este tránsito hacia Europa.
Y al respecto ha subrayado que “muchas de las que llegan han tenido que pagar con sus cuerpos el precio de este trayecto, la ‘tarifa’ para sortear las fronteras. Se cosifica a las mujeres, en este caso a las refugiadas, obligadas a pagar con su dignidad”.
A la jornada han asistido además Tomás de la Quadra – Salcedo, letrado del Tribunal Constitucional, y Ángel Gómez Montoro, director del Aula de Derecho y exrector de la Universidad de Navarra, que ha sido el encargado de introducir y contextualizar la sesión en la que se ha calibrado la firmeza de algunos de los principios básicos de la Unión Europea, como el de la libre circulación de personas.
“Estamos ante un reto impresionante para la UE, no tanto a nivel de eficacia, porque los inmigrantes no suponen más que el 0,11 por ciento de la población total de Europa” sino “por las reticencias de algunos países a admitir la vigencia de postulados que creíamos fundamentales”, ha dicho.
Y ha añadido que “la inmigración estaba cambiando ya el modo de entender los derechos fundamentales, de hecho los derechos de los extranjeros se equiparan ya casi a los de los ciudadanos, en parte también por la globalización. Ocurre que ahora, con esta última oleada de refugiados, se están poniendo a prueba algunos de los principios básicos sobre los que descansa la UE”.

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