Internacional

Obama: «El sentimiento antiinmigrante en EE.UU. no es nuevo pero es un error»

ABC, efewashington, 09-10-2015

Aunque sin nombrar a Trump, cargó contra quien ha causado un gran revuelo por su dura posición contra los inmigrantes

El presidente de EE.UU., Barack Obama, reconoció este viernes que el «sentimiento antiinmigrante» en Estados Unidos «no es algo nuevo», pero insistió en que «está equivocado» y rechazó los discursos «incendiarios» y aquellas posturas que enarbolan «las banderas de la intolerancia».


Durante su intervención en la gala de premios del Instituto del Caucus Hispano del Congreso (CHCI) celebrada este jueves en Washington, el mandatario aludió, aunque sin nombrarlo, al precandidato republicano Donald Trump, quien ha causado un gran revuelo por su dura posición contra los inmigrantes.


«Liderazgo no es avivar las llamas de la intolerancia y luego actuar todos sorprendidos cuando se produce un incendio. (…) El sentimiento antiinmigrante que ha infectado nuestra política no es nuevo pero es un error», aseguró.


«La grandeza de Estados Unidos no proviene de construir muros. Nuestra grandeza viene de construir oportunidades», aseguró Obama ante los asistentes a quienes recordó que más allá de los indios navajos, «todos» en Estados Unidos llegaron «desde otro lugar».


Aplaudido en varias ocasiones por la audiencia, gran parte de ella en pie durante todo el discurso, Obama recuperó uno de los lemas más efectivos de su campaña de reelección: «No abucheen, voten. Porque no escucharán vuestros abucheos, pero sí escucharán vuestros votos», añadió.


El mandatario enfatizó la importancia de que los latinos se registren para votar en las próximas elecciones y no hagan de su silencio político un victoria para aquellos republicanos que pretenden coartar sus derechos.


Obama hizo un repaso por los logros de su mandato, desde la drástica reducción del desempleo, también entre los latinos, hasta el incremento del acceso a los seguros médicos, pasando por la creación actual de empleo que contrasta con la destrucción de miles de puestos de trabajo que existía a su llegada a la Casa Blanca.


Pero el presidente reconoció también que «los cambios» no se logran de un día para otro, «ni tampoco en una legislatura, ni en el tiempo que gobierna un presidente», y llamó a los presentes, y a la comunidad latina a «votar» para continuar trabajando por esos cambios que, según dijo, ha demostrado son posibles.


Asimismo, el presidente recordó que el bloqueo en el Congreso de la tan demandada reforma migratoria no puede seguir justificándose con argumentos falsos, cuando los números demuestran que la seguridad fronteriza es mucho más efectiva que nunca y los expertos coinciden en que sería un revulsivo para la economía del país.


Obama aludió a su predecesor, George W. Bush, quien «hizo de la reforma migratoria una de sus prioridades», mientras ahora sus colegas republicanos rechazan llegar a un acuerdo para rectificar un sistema migratorio que todos saben ineficiente.


«No hay ningún asunto en el que quieran retroceder más que en inmigración – dijo sobre los republicanos – . Piensen en lo mucho mejor que iría nuestra economía si el resto de su partido entendiera su mensaje».


El mandatario prometió además seguir luchando «cada día» que le resta en la Casa Blanca por mejorar las condiciones de los inmigrantes, pelear por la reforma migratoria y por el acceso gratuito a la educación superior para aumentar las oportunidades de todos los ciudadanos. «Sí se puede, juntos podemos. Que dios los bendiga», concluyó su discurso en un mejorado español.

Texto en la fuente original
(Puede haber caducado)