No podía ir muy lejos. Apenas contaba con infraestructura ni con la astucia suficiente como para llevar a cabo una huida a gran escala. Sergio Morate, presunto asesino de Marina Okarynska y Laura del Hoyo, cuyos cadáveres fueron hallados el pasado miércoles en el río Huécar, en Cuenca, fue detenido ayer a las 18:30 horas en Rumanía, concretamente en una vivienda de la localidad de Lugoj, provincia de Timisoara, sin oponer resistencia. Junto a él fue arrestada otra persona de nacionalidad rumana. En el momento del arresto, los detenidos preparaban la casa para ocultarse.

Su huida desde Cuenca la llevó a cabo en un Seat Ibiza de color verde, con matrícula 1062CPF, vehículo al que también se le seguía la pista. De hecho, las autoridades españolas detectaron que el vehículo cruzó Francia por la frontera gerundense de Portbou. La Policía Rumana de Investigación Criminal llevó a cabo los arrestos, en colaboración con la Policía Nacional. Apenas unas horas antes, el titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Cuenca dictó una orden internacional de búsqueda para localizarle, que se ha cursado a Europol e Interpol. Sobre Morate hay una orden europea de detención y entrega. Según fuentes del Ministerio del Interior, se trata de un «proceso ágil» a la hora de extraditar al fugitivo. En todo caso, y al cierre de esta edición, dichas fuentes no creían que el traslado se realizara hasta el día de hoy. Por otro lado, se está pendiente de comprobar si los dos rumanos detenidos tenían alguna relación con el crimen, aparte de facilitar la infraestructura para la ocultación de Morate.

Las autoridades españolas sospechan que Morate eligió Rumanía asesorado por un ex compañero de prisión, con el que coincidió hace cinco años en el centro penitenciario de Cuenca. Morate cumplió allí más de un año de condena después de retener, agredir sexualmente a una ex novia, además de grabar el acto y amenazarla con subirlo a internet. El joven entró entonces en el módulo de ingresos. Fuentes cercanas al caso afirmaron que jamás dio problemas durante su estancia en prisión. De hecho, no llegó a entrar en el «núcleo duro» de la cárcel, pues el módulo de ingresos está reservado a presos que nunca habían cumplido pena –como era su caso– o que están a la espera de ser trasladados a otro módulo. Con todo, sí que hizo amistad con un preso rumano. Por aquel entonces cumplía pena por robo: desvalijaba naves industriales. Pero también tenía contacto con el mundo de la prostitución: «movía» a mujeres en la provincia de Cuenca. Desde entonces fueron uña y carne, incluso ya fuera de la cárcel: Morate salió en junio de 2011, mientras que su amigo llevaba en libertad unos dos años. Siempre estaban juntos. De hecho, Sergio no tenía inconveniente en dejarle su coche siempre que lo necesitaba. Ahora, la Policía baraja que este preso asesorara a Morate a la hora de elegir su destino de huida.

La Policía barajaba posibles destinos de huida para el presunto asesino. De hecho, había una serie de países más «sensibles», pues podía contar con ayuda de conocidos, o incluso desplazarse desde allí a un tercer país. Se sabe que, días antes, Morate se había interesado por los países que no cuentan con acuerdos de extradición con España. Se barajaba también que huyera a Italia, al ser un país desde el que es fácil volar hasta Sudamérica –se hablaba de la posibilidad de que eligiera Colombia–. También se barajaba la opción de Francia, debido a que Morate tiene familiares en el país vecino. Hay que recordar que las autoridades españolas, dentro de los protocolos, había contactado a principios de esta semana con las Policías de Francia y Portugal, al ser ambos países limítrofes.

El interrogatorio a Morate será clave para reconstruir los hechos que rodearon las muertes de Marina y Laura, de 26 y 24 años respectivamente. Sobre las 17:00 horas del pasado jueves 6 de agosto, Marina, ex novia de Morate, acudió a casa de éste para recoger sus pertenencias, pues habían puesto fin a su relación hacía unos meses. Estaba acompañada de su amiga Laura, que la acercó en coche. A partir de ahí, se produce un lapso temporal. La única noticia confirmada sobre las dos jóvenes tiene lugar ayer, cuando un agricultor que se encontraba cerca del río Huécar halló los cuerpos a última hora de la tarde. Los cadáveres se encontraban boca abajo y con quemaduras, debido a que el asesino había intentado quemarlas con cal viva. La Policía confirmó que Morate compró este producto días antes en Cuenca, por lo que se cree que su acción pudo estar planificada desde el principio. No en vano, en el registro de su domicilio se hallaron restos de cal. En todo caso, fuentes policiales señalan la «torpeza» a la hora de utilizar cal viva, un método que, «aunque dificulta la identificación, no elimina las pruebas, como pueden ser las lesiones de defensa». Se cree que las jóvenes pudieron ser asesinadas el mismo día de su desaparición.

Otro interrogante es si el joven actuó solo o acompañado. Ahora, la sospecha de que recibió ayuda por parte de un ex compañero de prisión puede ser determinante. Como informó ayer este diario, la Policía investigaba a un recluso que podría haber disfrutado de permiso penitenciario el día del crimen. Lo cierto es que este preso, de origen colombiano, contaba con una coartada: declaró a los agentes que sus días libres los pasó en Alicante, por lo que su participación parece descartada, informa Ep. También se certificó la hora de llegada de este reo a la ciudad valenciana. Sin embargo, la Policía quiere agotar todas las vías. De hecho, ha pedido a la prisión de Cuenca que informe de la ropa que llevaba dicho preso al salir de la cárcel, así como de otras cuestiones.

En todo caso, no se ha abandonado la hipótesis de que el joven perpetrara el doble crimen sin ayuda. En este sentido, el resultado de la autopsia podría aportar algo de luz.

Sergio Morate fue localizado en Lugoj, una ciudad de poco más de 40.000 habitantes situada en la provincia de Timisoara, en la parte occidental de Rumanía. Port Bou (Gerona) fue el punto por el que salió el fugitivo de España, según han indicado fuentes de la investigación.

Un tribunal del este de Rumanía decidirá hoy sobre la extradición de Sergio Morate. “La Corte de Apelación de Timisioara, que dispone de todas las medidas legales para la entrega del presunto asesino a las autoridades españolas, decidirá a lo largo de este día sobre su extradición”, señaló a Efe por teléfono la portavoz de la Policía de la provincia de Timis, Mirela Draghicioiu. La funcionaria aclaró además que, junto con el presunto asesino español, se detuvo solo a un ciudadano rumano por supuesta complicidad y no a dos como se había informado inicialmente.

“Los agentes han arrestado a un hombre, de 27 años, con cargos de complicidad en el mismo domicilio donde fue detenido” Morate, explicó la portavoz policial.