La Diputación de Gipuzkoa ha presentado este miércoles ‘Diversidad identitaria de la población vasca’, un estudio realizado entre mayo y octubre de 2013 cuyo objetivo ha sido el análisis y estudio de la diversidad de origen y cultural entre la ciudadanía vasca. El trabajo, elaborado por Aztiker a petición del gobierno foral, se ha realizado basándose en 2.014 entrevistas – 403 en Gipuzkoa – en la Comunidad Autónoma Vasca, Navarra e Iparralde.

Una de las principales conclusiones que recoge el informe es que el 86,9% de los vascos considera que todos los residente en el territorio deben contar con los mismos derechos y deberes. El estudio también recoge que uno de los colectivos que menor simpatía despiertan en Euskadi y Navarra son los marroquíes y los rumanos, aunque en menor medida en Gipuzkoa. Pese a esos datos, Asier Etxenike, coordinador de investigaciones de Aztiker, ha explicado que en vista de los resultados “no se puede considerar que la población guipuzcoana sea racista o que tenga una actitud negativa ante cualquier persona” que no sea originaria del territorio.

Etxenike ha explicado también que el perfil de las personas con una actitud más abierta respecto a la diversidad son jóvenes, residentes en Iparralde, personas llegadas a tierras vascas en los últimos quince años, personas con estudios superiores y trabajadores por cuenta ajena y aquellos de una ideología de izquierdas.

Otra de las conclusiones que se ha dado a conocer en la presentación, que también ha contado con Itziar Pildain, directora de Migración y Diversidad, es que para los guipuzoanos, una persona migrante que quiera obtener los derechos de los que goza cualquier ciudadano del territorio debería llevar un tiempo viviendo aquí, trabajar en el territorio y querer ser ciudadano de este territorio.