Quiero irme a Australia

Una malagueña comparte su experiencia en el país con otros jóvenes

Diario Sur, Alvaro Frías, 19-09-2014

Los miles de kilómetros que separan Australia de España no asustaron a Ana Peralta. Esta malagueña, ante la mala situación laboral a la que se enfrentaba, decidió partir a las antípodas para vivir una experiencia que, asegura, volvería a repetir. Ayer fue un día en el que recordó mucho de lo que ha pasado allí y lo hizo para compartir su experiencia con un grupo de jóvenes que están dispuestos a viajar y probar suerte en el país.

Decidirse a partir no fue un problema. Peralta recordaba que, a sus 34 años, tenía un empleo como trabajadora social con el que no ganaba mucho: «Después de pagar el alquiler me quedaba casi sin dinero para hacer otras cosas».

Siempre había querido conocer las antípodas y lo hizo. Contó con la ayuda de AUssieYouTOO.com, un grupo de apoyo online a personas que emigran a Australia, fundado y dirigido por españoles. Desde la empresa explican que las antípodas se están convirtiendo en uno de los destinos más demandados por los jóvenes.

Explican que en 2008 – 2009, cuando comenzó la crisis, se otorgaron un total de 559 visados de estudiante a españoles para acudir a escuelas de inglés en Australia. Sin embargo, cuatro cursos después, esta cifra casi se triplicó.

Precisamente, el visado de estudiante es la clave para entrar en el país. Peralta explicaba al grupo de jóvenes que es necesario para ello. «Una vez allí también te permite trabajar y ya depende de las horas que quieras emplear estudiando. Una amiga estaba apuntada a un curso de surf», precisaba.

Aunque lo más común es hacer cursos para aprender inglés. Ana lo hizo, aunque también se puso a trabajar como camarera. Aseguraba que el sueldo le daba para vivir allí y ahorrar algo de dinero para cuando regresara a Málaga.

La gran mayoría de los jóvenes que se encontraban ayer en el restaurante La Galerna en Pedregalejo, enclave en el que tuvo lugar el encuentro, compartían el objetivo de Ana, ya que su idea para acudir allí es la de mejorar su nivel de inglés.

Salvador Jiménez, de 24 años, está licenciado en INEF (educación física). Hace unos meses se marchó a Dublín para estudiar inglés y ahora lo hará a Australia. «Este verano he estado trabajando de monitor en un gimnasio, pero no es lo que quiero. Allí voy a hacer un curso de gestión de eventos deportivos», apuntaba.

Buen clima y ambiente

En Australia disfrutará de un gran ambiente. Ana explicaba que la ciudad en la que estuvo, Brisbane, es muy parecida a Málaga. Tanto en el clima como en la amabilidad de la gente, aseguraba: «Voy a echar mucho de menos la vida que había en la calle. Aquí también la hay, pero no tanta».

Es una descripción que alentaba a los jóvenes que la escuchaban. Algunos aún están pensándoselo y otros ya cuentan con casi todos los documentos necesarios para iniciar su particular aventura.

La de Ana ha salido muy bien. Al menos, así lo aseguraba ella. Los nueve meses que ha estado en Australia le han servido para aprender inglés, sacarse unos ahorros y vivir una gran experiencia. «Hasta me tiré al barro y aprendí a hacer surf. Si no lo hacía allí no lo iba a hacer nunca», apuntaba.

Ana pretendía que su experiencia en Australia fuese más larga. Sin embargo, ha tenido que volver antes de tiempo. El por qué, aún es un secreto, insiste mientras una gran sonrisa se dibuja en su cara.

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