Cataluña quiere prohibir el ‘burka’ esta legislatura

CiU recibe el apoyo de PP, PSC y C’s para vetar la prenda en espacios públicos

El Mundo, JAVIER OMS BARCELONA, 19-07-2013

Su presencia en las calles catalanas es anecdótica, cuando no inexistente. Sin embargo, el Govern se ha embarcado ya en la creación de una ley que prohíba expresamente el uso del burka–y del niqab, éste sí visible en poblaciones catalanas y algunos barrios de Barcelona– en todos los espacios y edificios públicos. Un veto a las prendas islámicas que ocultan el rostro de la mujer que CiU aspira a tener aprobado antes de finalizar la legislatura, en 2016.

El debate, propuesto a través de una moción de la propia CiU que ayer recibió en el Parlament el apoyo de PP, PSC y Ciutadans –sus socios de ERC se abstuvieron, mientras que ICV-EUiA y la CUP la rechazaron– no es nuevo en Cataluña. Además del antecedente fallido del Ayuntamiento socialista de Lérida –cuya normativa contra el burka fue frenada el pasado febrero por una sentencia del Tribunal Supremo–, también se trata de una vieja aspiración de la federación nacionalista que no pudo llevar a cabo durante la pasada legislatura. Sin embargo, sí resulta novedoso el camino escogido ahora para sacarla adelante. Su principal promotor, el conseller de Interior, Ramon Espadaler, la incluirá en la futura ley del espacio público bajo el argumentos de «orden público». Así, defendiendo que se trata de una cuestión de seguridad y esquivando en todo momento el debate religioso o cultural, el Govern evitaría no sólo el reproche del Supremo –argumentó en el caso de Lérida que limitaba la libertad religiosa–, sino también un eventual veto de los tribunales internacionales.

El objetivo es que la prohibición de utilizar prendas que tapen el rostro en lugares donde sea obligatorio identificarse –juzgados, comisarías, oficinas de la Seguridad Social y cualquier otro centro público donde deba presentarse un documento oficial y, por tanto, enseñar el rostro– conviva bajo el mismo marco legal que también vetará la presencia de encapuchados en las manifestaciones callejeras, uno de los mayores desafíos a los que se enfrentan los Mossos cuando hay incidentes. Según fuentes de Interior, el redactado de la futura ley del espacio público será clave para discernir entre unos casos y otros –los vándalos y las mujeres que porten velo islámico–, así como para graduar su aplicación en el caso de los pasamontañas u otras prendas, dependiendo de si se trata de manifestaciones de riesgo o bien concentraciones pacíficas.

La moción aprobada ayer también incluye armar a los ayuntamientos con cobertura legal para que puedan aplicar ordenanzas propias en torno al burka, siempre y cuando éstas respondan a objetivos de «seguridad y espacio público». Precisamente, la sentencia del Supremo contra la iniciativa de Lérida se sostenía también en su falta de competencias, que residen en la Generalitat.

Cuando Cataluña logre aprobar la nueva ley se convertirá en el primer Gobierno autonómico de todo el Estado en contar con una legislatura específica, ya que España carece de una norma para prohibir el uso de este tipo de prendas.

Amnistía Internacional, la Asociación de Mujeres Musulmanas de Catalunya, CCOO, la Federación de Asociación de Vecinos de Catalunya (Confavc) y SOS Racismo, entre otros colectivos, consideran que la prohibición de estas prendas «excluye y aísla» a las mujeres que las usan y estigmatiza a los musulmanes.

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