Prostíbulo, sí. Mezquita, no. O lo que es lo mismo: dos sentencias dispares sobre los equipamientos que pueden o no construirse en un mismo polígono. La singular contradicción se ha dado en Lleida. Esta semana se hizo pública la sentencia dictada por el Tribunal Superior de Justícia de Catalunya (TSJC), que prohíbe levantar en el polígono El Segre una mezquita por considerar que esos terrenos únicamente pueden ser destinados a uso industrial. Y ayer se conoció otra sentencia, adelantada por el diario Segre, dictada por el juzgado de lo contencioso de Lleida que dice todo lo contrario, pues este último fallo permite levantar un prostíbulo en esa misma área, sólo dos calles más allá de la parcela donde se había proyectado construir la mezquita.

El fallo del TSJC recoge que esos terrenos, recalificados por el Ayuntamiento de Lleida para que su uso pase de industrial a equipamientos, no son aptos para locales de concurrencia pública. La sentencia obliga, por lo tanto, a la Paeria a dar marcha atrás y devolver a esa parcela su uso industrial. El fallo del juzgado de lo contencioso administrativo dice, sin embargo, todo lo contrario, pues al permitir que en ese mismo polígono se levante un prostíbulo está diciendo, consideran fuentes jurídicas consultadas al respecto, que esos terrenos pueden tener otros usos, más allá del industrial.
El Ayuntamiento de Lleida, que había negado la licencia a los promotores de ese club de alterne, no esconde su sorpresa por estos dos enfrentados puntos de vista, desde el ámbito judicial, sobre el uso que puede darse a las parcelas de un mismo polígono. Aunque hay que recordar que la Paeria sí sostenía, en el caso de la mezquita, que esos terrenos podían acoger equipamientos de concurrencia pública. Cabe recordar que la sentencia del Superior de Justícia se ha dictado después de que una asociación de empresarios con negocios en ese polígono denunciaran la recalificación de la Paeria, que cambió el uso original dado a esa parcela. En este caso, la Paeria no piensa recurrir, ya que ninguna entidad musulmana se interesó al final por construir una mezquita en esos terrenos, pero sí ha anunciado ya que va a elevar a una instancia superior el fallo que permite, en el polígono del Segre, un prostíbulo. En el fallo del contencioso administrativo se apunta que el motivo por el que el Ayuntamiento denegó esta licencia “tiene más que ver con el objeto del negocio propuesto (un club de alterne) que con otra cosa”.
La empresa promotora de ese prostíbulo pretende levantar, muy cerca de donde estaba prevista la mezquita, un local de ochocientos metros cuadrados, con bar, doce habitaciones y un aforo que ronda el medio centenar de personas.