Aprovecharon un descuido en uno de los traslados de grupo para desplegar su plan y emprender la huida. Veinticinco inmigrantes irregulares lograron escapar este sábado del Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de Sangonera La Verde tras golpear a cuatro policías nacionales con mangueras, extintores y mobiliario urbano. Quince de estos evasores ya han podido ser arrestados y se enfrentan a los presuntos delitos de atentado a la autoridad, lesiones y daños. La Policía Nacional sigue tras la pista de los otros diez ‘ilegales’ fugados.

Este motín se produjo sobre las 19.40 horas, cuando los agentes del Cuerpo Nacional de Policía, que se encargan de la vigilancia de este centro, trasladaban a un grupo de una treintena de internos desde una sala común hasta los aseos. De manera sorpresiva y de forma organizada, según fuentes policiales, los inmigrantes comenzaron a atacar a los agentes, agrediéndoles con mangueras, extintores y otros útiles del centro. Durante el ataque, además, los internos pulverizaron el contenido de varios extintores para aumentar el ‘caos’ en el centro y consiguieron fugarse de allí una vez que salieron del edificio central y saltaron la valla que rodea el perímetro de las instalaciones.

Los cuatro agentes que vigilaban a estos internos solicitaron refuerzos de forma inmediata, pero no pudieron evitar la fuga. Además, estos policías sufrieron heridas de diversa consideración derivadas del ataque, y fueron trasladados a La Arrixaca para recibir asistencia.

Heridos al saltar la valla

En los minutos posteriores a la evasión, la Policía logró detener a doce de estos inmigrantes en los alrededores del centro. Otros dos de estos fugados fueron apresados en la mañana de ayer. Todos los arrestos se han practicado en zonas muy cercanas al propio centro, como San Ginés, Alcantarilla y El Palmar. Algunos de ellos también han sufrido heridas, según indicaron fuentes policiales, provocadas por el salto del vallado del centro. La Policía se afana ahora por dar con el paradero de la decena de inmigrantes que lograron huir del CIE y que aún no han sido arrestados. Este Cuerpo confiaba, al cierre de esta edición, en un pronto arresto, para lo cual ha establecido un amplio dispositivo de búsqueda por la zona.

Los 25 inmigrantes que han protagonizado esta fuga eran ciudadanos argelinos, dirigidos al CIE de Sangonera La Verde tras llegar a la costa murciana a bordo de una patera. Habían ingresado allí el 10 de junio pasado y no era la primera vez que trataban de escapar, según informó ayer el jefe superior de Policía de Murcia, Cirilo Durán. Según Durán, este grupo ya había intentado en otras ocasiones fugarse del CIE, la última hace unos días, durante un traslado a un centro médico, y su carácter «violento y de continuas provocaciones» había llevado a la Policía a reforzar los efectivos desplegados en el Centro. No se trata de delincuentes, sino de inmigrantes irregulares que no tienen permiso para residir en el país y aguardaban en el centro la repatriación.

El jefe superior de Policía de Murcia resaltó ayer la actuación de los agentes intervinientes en esta fuga, que resultaron heridos con policontusiones, aunque no requirieron estancia hospitalaria. Además, subrayó que la principal preocupación de la Policía en estos casos es evitar que se extienda al resto de internos, en este caso, un centenar, la violencia de los asaltantes.

Actualmente, este centro acoge a 105 personas, pero tiene plazas para 148. Estas instalaciones están destinadas a acoger a todos los inmigrantes que alcancen la costa a bordo de una patera o a aquellos ‘irregulares’ que tengan antecedentes penales y policiales – siempre que el juez lo estime oportuno – . El tiempo máximo que los internos podrán permanecer en este centro es, al menos en teoría, el que estima la ley, 60 días. El dispositivo de búsqueda de esta decena de inmigrantes irregulares continúa abierto mientras se ultiman las diligencias policiales para el traslado de la quincena de detenidos al juzgado de guardia.