El portavoz del partido neonazi griego Aurora Dorada, que en las elecciones de mayo logró entrar en el Parlamento con casi medio millón de votos (7%), agredió ayer a dos políticas de izquierda durante un debate de televisión que se emitía en directo.
A diez días de una repetición de comicios que tiene a Europa en vilo, Ilias Kasidiaris arrojó agua a una líder de la coalición de izquierda radical Syriza y luego golpeó en la cara a una diputada comunista, en un episodio que provocó una condena unánime del resto de fuerzas políticas y una orden de detención contra el agresor, que se dio a la fuga.
El debate matutino de la cadena privada Antenna, al que habían sido invitados representantes de las siete fuerzas parlamentarias, se fue caldeando cuando Kasidiaris, de 31 años, llamó “vieja roja” a la conocida diputada comunista Liana Kanelli, de 58, que le respondió: “Fascista”.
Pero la violencia física no estalló hasta que Rena Duru, de Syriza, sacó a relucir la presunta implicación de Kasidiaris –que debe comparecer el lunes ante un tribunal– en la agresión de un universitario izquierdista, y este le arrojó el agua de su vaso desde el otro extremo de la mesa, mientras le llamaba “payasa”. La comunista Kanelli, sentada junto al ultraderechista, se levantó y le tiró un manojo de papeles encima. Él se abalanzó sobre de detención. La policía proseguía anoche su búsqueda, pero la ley fija un plazo máximo de 24 horas para el arresto.
Ilias Kasidiaris, que como muchos miembros de Aurora Dorada sirvió en las fuerzas especiales del ejército, es un hombre de confianza del líder de la formación, Nikolaos Michalioakos, que le nombró portavoz. El partido emitió un comunicado en el que acusaba a Kanelli de atacar primero, “golpeándole en la cara, sin provocación, con unos documentos”. “Aurora Dorada continúa su lucha por un movimiento nacionalista fuerte contra todo el mundo, y por supuesto contra los huérfanos de Marx, que controlan los medios y están jugando a una sucia propaganda”.
El caso judicial que pesa sobre Kasidiaris se remonta al 2007, cuando un universitario conocido por su militancia izquierdista fue agredido y sus documentos robados. Se descubrió que el coche de Kasidiaris fue utilizado por los agresores, aunque él asegura que ese día estaba en el hospital. El juicio debía celebrarse el miércoles, pero fue pospuesto al próximo lunes.
Los miembros de Aurora Dorada se han visto implicados en varios ataques a anarquistas e izquierdistas –con quien suelen enfrentarse en batallas callejeras– y a inmigrantes, aunque el partido siempre niega estar detrás. Rechazan ser neonazis, a pesar de que el propio Michalioakos haya sido grabado haciendo el saludo nazi y niegue el holocausto. Se califican como “nacionalistas griegos” y quieren limpiar Grecia de inmigrantes, a quienes culpan del aumento de criminalidad. En algunos barrios de Atenas es habitual ver patrullando a sus chicos, rapados y con el logo del partido, muy parecido a la esvástica.
El fulgurante ascenso electoral de Aurora Dorada –del 0,4% al 7%– ha disparado las alarmas. Muchos consideran que el silencio informativo sobre sus actividades les ha favorecido. Ayer Kanelli mostraba orgullosa su morado en el rostro, su “medalla de honor”. Y la portavoz del socialdemócrata Pasok llamó “a todos los griegos que votaron por Aurora Dorada a que lo reconsideren” el 17 de junio. Los sondeos pronostican un ligero descenso, pero parece que los neonazis seguirán en la Cámara.