Día internacional de la eliminación de la violencia contra la mujer

La sombra de las mariposas

Diario de noticias de Gipuzkoa, ana úrsula soto , 25-11-2011

25de noviembre de 1960. “A partir de ese día cambió la historia en Santo Domingo”, afirma Belquis John, presidenta de la Asociación de Dominicanos de Euskadi (Asodeus).

Mucha gente lo desconoce, pero el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia Contra la Mujer se celebra hoy en conmemoración del brutal asesinato en la República Dominicana de las hermanas Mirabal por su activismo político en contra del dictador Rafael Trujillo (1930-1961). “Patria, Minerva y María Teresa”, recita de memoria Eliana Camilo, integrante de Asodeus, como quien hace lo propio con la tabla de multiplicar. No en vano, la historia de las hermanas Mirabal “es materia en la escuela”. “Su ejemplo como madres y como mujeres fuertes ha marcado a las dominicanas”, añade John.

La férrea oposición que Patria, Minerva y María Teresa Mirabal, conocidas popularmente como Las Mariposas, mantuvieron en contra de la dictadura de Trujillo, llegando a crear la plataforma Agrupación Política del 14 de junio, no solo les conllevó la pérdida de sus bienes, la persecución de sus familias y la agresión directa a sus personas fueron encarceladas y torturadas, sino que conllevó, finalmente, su asesinato a palos el 25 de noviembre de 1960. Lo que no podía imaginarse el dictador es la reacción que conllevó lo que fue denominado por la prensa afín al régimen como un accidente. El 30 de mayo de 1961, seis meses después de la muerte de las hermanas, Trujillo era asesinado.

Fue la propia República Dominicana la que, con el apoyo de 60 países, propuso la conmemoración del 25 de noviembre, que fue designada oficialmente el 17 de diciembre de 1999 para que la memoria de Las Mariposas siga siempre viva. “De ellas se aprende que luchando y siendo fuerte se puede conseguir cualquier cosa,”, afirma John, aún teniendo presente el fatal destino que sufrieron las hermanas. “Pero nunca se dejaron humillar”, apostilla. “La mujer dominicana nunca pierde la esperanza de que allí donde esté siempre le acompañará una estrella, la de las hermanas Mirabal. Gracias a ellas tenemos la fuerza para luchar por lo que se quiere”, expresa.

Por eso, John reprueba duramente el maltrato, presente tanto en la sociedad dominicana como en la vasca, la cual conoce muy bien por llevar 17 años asentada en Donostia. “Hay que plantarse ante el maltratador y decir: ¡Basta ya! En cuanto aparecen los maltratos psicológicos hay que cortar, de nada sirve aguantar. No importa nada, ni las cosas que tengas, ni la casa… Si estás con un maltratador, déjale porque eso ya no es una relación”, asevera la presidenta de Asodeus, desde donde han querido recuperar la memoria de las hermanas Mirabal porque, como indica Camilo, en días como hoy “es un orgullo ser dominicana” a la sombra de Las mariposas.

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