pamplona. Aunque la investigación desarrollada por la Policía Foral y la Policía Municipal de Pamplona continúa abierta, fuentes de la investigación indicaron que la titular del Juzgado de Instrucción número 3 les imputará un delito de asociación ilícita, un tipo penal nunca empleado antes en Navarra para esta clase de grupos delictivos.

Los arrestos tuvieron lugar ayer desde primera hora de la mañana en Pamplona y Barañáin, principalmente y entre los jóvenes detenidos se encuentran los que están considerados líderes del grupo, constituido a imagen y semejanza de la banda surgida en Estados Unidos. Algunos de los detenidos son de nacionalidad española, aunque la mayoría son de origen latino, y entre ellos hay menores de edad, aunque la mayor parte ronda la veintena de años. Entre hoy y mañana serán puestos a disposición judicial.

Las pesquisas se iniciaron durante el pasado verano, después de que se sucedieran diferentes altercados a raíz de una pelea multitudinaria para la que se habían citado varios grupos en el marco de las fiestas de Barañáin, lo que llevó a la Policía Foral y a la Policía Municipal a crear un grupo conjunto de investigación con el fin de depurar las responsabilidades penales de los implicados.

Al compartir la información que uno y otro Cuerpo policial disponían, pudieron identificar a los cabecillas de la banda, así como a otros miembros implicados en hechos como trapicheo de drogas, delitos de lesiones, reyertas multitudinarias, agresiones con arma blanca o de tipo sexual, y recopilar pruebas que sostendrían que se trata de una organización ilícita.

El propio fiscal superior del TSJN, Javier Muñoz, alertó durante el acto de apertura del año judicial sobre la actividad de estas bandas en Navarra, advertencia que reiteró en su más reciente comparecencia en el Parlamento, donde adelantó que estaba valorando la posibilidad de imputar el delito de asociación ilícita a un joven acusado del apuñalamiento de un menor, ocurrido el pasado 28 de octubre.

asociación criminal El Código Penal establece que se consideran ilícitas las asociaciones que “tengan por objeto cometer algún delito o, después de constituidas, promuevan su comisión, así como las que tengan por objeto cometer o promover la comisión de faltas de forma organizada, coordinada y reiterada”. Asimismo, las que “aun teniendo por objeto un fin lícito, empleen medios violentos o de alteración o control de la personalidad para su consecución”.

Con las actuales herramientas legales, derivadas de la última reforma penal, los jueces, fiscales y policías pueden perseguir a estos grupos sin que hayan cometido un hecho delictivo, ya que sólo la pertenencia a una organización o grupo ilícito ya constituye una infracción penal. Aunque estos grupos no pueden ser considerados organizaciones, ya que la ley exige para ello que tengan una estabilidad, un reparto de funciones y un designio delictivo claro y definido, sí pueden definirse como “grupos criminales”.

Según fuentes policiales, los Latin Kings se encuentran integrados en el grupo Zona Bara de Barañáin, junto con otras dos pandillas. En total suman un centenar de miembros, de procedencia ecuatoriana, colombiana, brasileña, boliviana, rumana y también española. Más de una treintena de estos jóvenes habían sido detenidos con anterioridad.