Aunque el imán pasó el viernes a disposición judicial y quedó en libertad tras prestar declaración, la operación continúa abierta.

Aunque el imán pasó el viernes a disposición judicial y quedó en libertad tras prestar declaración, la operación continúa abierta.

La investigación que permitió detener, el pasado miércoles, al imán de Ribeira, Sidi Batt Ould Tiyib, se inició hace varios meses. Los agentes judiciales de la comisaría ribeirense tenían sospechas de que este ciudadano mauritano asentado en la capital barbanzana realizaba, aprovechándose de que regenta dos negocios, contratos falsos a inmigrantes. Sin embargo, la falta de pruebas concluyentes impedía actuar a la Policía Nacional.

La clave que permitió intervenir a los profesionales se produjo hace unos días, cuando un extranjero que no pudo regularizar su situación presentó una denuncia contra el imán. Esa demanda proporcionó a los agentes el instrumento que les faltaba para confirmar las sospechas que tenían desde hace tiempo y proceder al arresto.

Operación abierta

Aunque el imán pasó el viernes a disposición judicial y quedó en libertad tras prestar declaración, la operación continúa abierta. Los agentes judiciales sospechan que, al menos, podría haber realizado media docena de contratos falsos y no se descarta tampoco que la cifra pueda ser todavía más elevada.