Dinamarca olvida la inmigración y se dispone a votar socialdemócrata

La Vanguardia, , 15-09-2011

CECILIA MORA – Estocolmo. Servicio especial

La crisis hunde al Gobierno liberal, que lleva diez años en el poder con apoyo de los populistas
Sumida en una grave crisis, Dinamarca celebra hoy elecciones anticipadas, marcadas por la política económica y el futuro del estado de bienestar. Por primera vez en diez años, la inmigración ha pasado a un segundo plano.

De cumplirse las intenciones de los electores, la líder socialdemócrata, Helle Thorning-Schmidt, será la primera mujer en ocupar la jefatura del Gobierno. Los sondeos le dan una cómoda ventaja sobre la coalición conservadora y liberal del primer ministro Lars LøkkeRasmussen, que pasará a la oposición tras una década de mandato ininterrumpido.

Thorning-Schmidt, de 44 años, considera que la estrategia de austeridad y rebaja fiscal que propone la derecha para salir de la crisis no es correcta.

LøkkeRasmussen, de 47 años, no cree que subir los impuestos sea la fórmula adecuada para impulsar el crecimiento. La presión fiscal en Dinamarca es de las más altas del mundo,

Si se cumplen las encuestas publicados ayer en los diarios Politiken y Jyllands-Posten,los socialdemócratas (y sus aliados de centroizquierda) obtendrán 91 diputados frente a los 84 de la coalición de gobierno. El Folketing tiene 179 escaños.

El ultraconservador Partido Popular Danés, que ha apoyado desde fuera al Gobierno de LøkkeRasmusssen, perderá su gran influencia política. Fue su férrea postura antiinmigratoria la que ayudó al liberal Anders Fogh Rasmussen a hacerse con el poder en el 2001. Fogh Rasmussen abandonó el gobierno hace dos años para asumir el cargo de secretario general de la OTAN.

Lo sustituyó LøkkeRasmussen.

Los populistas han apoyado desde fuera a la coalición de gobierno, que ha gozado de mayoría absoluta en estos diez años. Además de leyes draconianas para impedir la entrada de nuevos inmigrantes, la carismática líder populista, Pia Kjaersgaard, logró este verano sacar adelante su propuesta de reforzar los controles fronterizos permanentes daneses con el argumento de que así reducirían la delincuencia.

La medida fue muy criticada por Berlín y Bruselas. Dinamarca está en el espacio Schengen, que garantiza la libre circulación de personas y mercancías.

Dinamarca ha conservado su moneda – la corona danesa-,pero su economía depende de las exportaciones a Europa y, por lo tanto, del euro. Para combatir el déficit Rasmussen ha retrasado dos años la jubilación (hasta los 67) y ha reducido las prestaciones a los parados y prejubilados.

Las medidas de estímulo, especialmente para reactivar el sector inmobiliario, no han funcionado. Los socialdemócratas subirán los impuestos a los ricos y los bancos. No tocarán las estrictas políticas antiinmigratorias pero sí levantarán los controles de carretera con Suecia y Alemania.

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