Internacional

Los fiscales piden la retirada de las acusaciones contra Strauss-Kahn

La Fiscalía no puede probar más allá de la duda razonable si el encuentro sexual fue forzado o consentido

ABC, MARÍA G. PICATOSTE / CORRESPONSAL EN NUEVA YORK, 23-08-2011

La suerte del ex director del Fondo Monetario Internacional parece estar a punto de cambiar. Los fiscales de Nueva York solicitaron ayer al juez del caso iniciado hace tres meses que desestime los cargos por abuso sexual e intento de violación formulados contra Dominique Strauss-Kahn en relación con el presunto asalto de la inmigrante africana Nafisatou Diallo. Los abogados de la supuesta víctima han respondido solicitando que el fiscal jefe de Manhattan sea retirado de este proceso.

De acuerdo con las información avanzada por el «New York Times», el fiscal del distrito de Manhattan Cyrus R. Vance considera que aunque efectivamente hubo un encuentro sexual entre Diallo y Strauss-Kahn, no se puede probar más allá de la duda razonable si ese encuentro fue forzado o consentido. Todo por los graves problemas de credibilidad descubiertos en el testimonio de la víctima.

A pesar de que las pruebas de ADN tomadas en el hotel coincidían con el del socialista francés y de que el estudio que se le hizo en un hospital a Diallo tras la denuncia demostraba que la camarera había sido violada, las sombras sobre el testimonio de Diallo parecen ser mucho más relevantes que las pruebas médicas. Esta decisión supone un viraje de 180 grados para el rumbo del caso, ya que podría permitir a Strauss-Kahn regresar a Francia y teóricamente reactivar su carrera política.

La petición de retirada se produjo el día anterior a la comparecencia programada de Diallo ante los fiscales. La camarera de hotel fue citada mediante una carta enviada a sus abogados por la oficina que dirige Vance. En esta misiva adelantaban que la finalidad de la reunión era ofrecer explicaciones a Diallo.

La última vez que Diallo se reunió con la Fiscalía fue el 27 de julio, cita en la que volvió a defender su versión de los hechos ocurridos en la suite del Sofitel cercano a Times Square en el que trabajaba y puestos en duda por el descubrimiento de ciertas mentiras sobre su pasado.

Kenneth Thompson, abogado de Diallo, acusó al Ministerio Público dirigod por Vance de estar «decidida a tratar a Diallo como a un acusado y a Strauss-Kahn como a una víctima», ya que desde el momento en el que se demostró que Diallo había mentido en su petición de asilo a Estados Unidos y sobre una supuesta violación anterior, la Fiscalía pareció investigar más a la camarera guineana que al francés.

«A través del uso de la intimidación, filtraciones falsas y poco escrupulosas a la prensa y mediante ataques públicos a la víctima y sus abogados, su oficina ha conseguido retroceder en el tiempo hasta una época en la que las víctimas de abusos sexuales raramente daban la cara por miedo a exactamente lo mismo que le ha pasado a Diallo», según los reproches remitidos por Thompson a los fiscales en una carta fechada el 8 de agosto. El mismo día que Diallo presentó una demanda civil contra Strauss-Kahn, decisión que ha sido interpretada como un desesperado intento por llegar a un acuerdo económico con la defensa del acusado. Desde entonces, la relación de Diallo y sus abogados con la Fiscalía ha estado marcada por la desconfianza, agudizada cuando la oficina de Vance descubrió que Thompson podría haber tratado de llegar a un acuerdo con la defensa de Strauss-Kahn.
Escándalo internacional

El caso saltó a la prensa el 14 de mayo, cuando Dominique Strauss-Kahn fue sacado de un avión de Air France que estaba a punto de despegar del aeropuerto neoyorkino John F. Kennedy con destino a París, y arrestado. Tras pasar casi una semana en la prisión de Rikers Island, el juez le permitió permanecer en arresto domiciliario tras pagar una fianza de un millón de dólares. Desde entonces, Strauss-Kahn ha permanecido en un lujoso apartamento custodiado por agentes armados y donde todos sus movimientos eran monitorizados por un dispositivo atado a su tobillo.

Ante el escándalo internacional, Strauss-Kahn optó por abandonar su cargo como director gerente del Fondo Monetario. La decisión fue anunciada a través de un comunicado divulgado por el propio el FMI en el que el ex ministro francés insistía en la necesidad de invertir toda su fuerza, tiempo y energías a probar su inocencia.

Antes de que Strauss-Kahn fuera detenido y presentara su dimisión del FMI, ya estaba previsto que abandonase el cargo para poder formalizar su candidatura a las elecciones presidenciales francesas que se celebrarán el próximo año. Proceso para el que partía muy bien posicionado, ya que era el candidato mejor valorado en los sondeos para suceder a Nicolas Sarkozy.

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