La Guardia Civil detuvo ayer a siete inmigrantes, todos ellos hombres mayores de edad y en buen estado de salud, en una patera procedente del puerto argelino de Dellys que fue detectada por el Sistema Integrado de Vigilancia Exterior (SIVE) e incerceptada al nordeste de Cabrera esta madrugada.

El radar del SIVE ubicado en Cabrera detectó la presencia de la patera procedente del sur en torno a las 00:30 horas y ha seguido su trayectoria para conocer su rumbo, que era en dirección a Mallorca, según informó el delegado del Gobierno, Ramon Socias.

Una patrullera de la Guardia Civil la interceptó a las 2:30 horas al nordeste de Cabrera y remolcó hasta el Puerto de Palma, al que llegó en torno a las 7:00 horas. Sus ocupantes fueron conducidos a dependencias de la Guardia Civil para determinar su procedencia.

Los siete hombres realizaron una travesía de 20 horas en una lancha de 4,80 metros de eslora propulsada por un motor de 35 caballos, y además llevaban otro motor auxiliar de 30 caballos en el interior de la embarcación, así como garrafas de agua, combustible y alimentos.

A lo largo del día fueron trasladados a la Jefatura Superior de Policía, donde se preparó su expediente de devolución, y serán puestos a disposición judicial previsiblemente hoy por la mañana y saldrán hacia el Centro de Internamiento de Inmigrantes de Barcelona mañana, donde permanecerán hasta su devolución a su país de origen, según prevé la Delegación del Gobierno.

Socias recordó que se trata de la tercera patera que llega a las islas este año, tras la avistada por pescadores el pasado 18 de junio también en aguas del sur de Cabrera y que llevó a la detención de once inmigrantes ilegales, y la detectada por un radar el 18 de enero, que arribó a las costas de Ses Salines, con ocho inmigrantes.

El delegado del Gobierno aseguró que la situación de Baleares en relación a la llegada de inmigrantes en patera “es buena” en comparación con otros lugares de España y otros países europeos, porque la frecuencia es muy baja, con tres embarcaciones en ocho meses, y porque además suelen llegar con pocos tripulantes, 26 en total en lo que va de año, y en buen estado de salud por ser una travesía corta y en condiciones marítimas favorables.

En los tres casos de este año, las embarcaciones procedían del puerto argelino de Dellys, en lo que constituye “casi una línea regular”, según declaró el delegado del Gobierno, ya que la mayoría de las pateras detectadas en los últimos años tenían este mismo origen.