Marruecos se ha comprometido a reforzar sus controles para evitar la entrada en España de emigrantes ilegales procedentes del África subsahariana por Ceuta y Melilla. Según explicó el director general de la Policía y la Guardia Civil, Francisco Javier Velázquez, de visita en Rabat, sus interlocutores en el Gobierno marroquí se comprometieron a «reforzar el control fronterizo y los sistemas para contener el flujo migratorio ilegal».

En las últimas tres semanas se ha detectado un aumento de entradas ilegales de inmigrantes africanos en Ceuta y Melilla tanto por tierra como por mar, fenómeno que ha hecho saltar las alarmas y que ha sido el principal motivo de la visita de Velázquez. Aunque las autoridades marroquíes no han hecho el menor comentario público al respecto, dieron a entender a sus interlocutores que el esfuerzo policial ha estado concentrado en el frente político interno, en contener las protestas producidas por el referéndum de la nueva constitución, celebrado el 1 de julio. Francisco Javier Velázquez alabó la cooperación existente entre las policías española y marroquí. Señaló que las reuniones que se producen con el país vecino son continuas y, de igual modo, destacó que el intercambio de información en la persecución del narcotráfico es constante.

Las declaraciones del director general de la Policía y la Guardia Civil se conocieron horas después de que en las inmediaciones del dique sur se avistase una nueva embarcación. El Grupo Especializado en Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil interceptó la embarcación de juguete, rescatando a los cinco ocupantes de la barca.

Según informaron fuentes de la Delegación del Gobierno, los inmigrantes no precisaron atención sanitaria y fueron trasladados a las dependencias policiales para tramitar el correspondiente expediente de expulsión.