La madrugada del martes al miércoles se convirtió en una verdadera escena de terror para una familia marroquí residente en un pequeño caserío situado en el carril de Los Arrieros, próximo a Lo Ulloa.

Eran las 5 de la madrugada. La noche era cerrada en esta zona, a la que la luz de las farolas no llega aún. Un desconocido, que la víctima ha identificado como de origen magrebí se coló en la vivienda de uno de los vecinos del caserío de Los Arrieros, con la intención de robar. Lo consiguió a medias, porque fue descubierto por el matrimonio marroquí que ocupaba la casa. Eso sí, dispuesto a lograr escapar y empuñando dos cuchillos de cocina, el asaltante se abrió paso apuñalando en la cara al cabeza de familia, mientras la mujer huía hasta un sembrado cercano.

El caserío se encuentra a las afueras del municipio y cuenta con apenas dos viviendas, una en la que habita una familia pachequera y en la otra las víctimas. Además, unos metros se encuentra una residencia agrícola en la que conviven varios inmigrantes.

Frente a la vivienda hay un campo cultivado de patatas, en el que la esposa del agredido se escondió huyendo del agresor. Desde allí pudo llamar al teléfono de emergencias 112, avisando que su marido se encontraba herido después de ser atacado por una persona que portaba dos cuchillos, según informaron fuentes del centro de coordinación de emergencias.

Al lugar acudieron efectivos de la Guardia Civil y una Unidad Móvil de Emergencias que atendió al herido, de origen magrebí y lo trasladó al hospital Virgen de la Arrixaca donde se encuentra hospitalizado, aunque no se teme por su vida. La Guardia Civil busca ahora intensamente al asaltante.