Cárcel para el 'asesino de la webcam'

El Mundo, P. HERRAIZ , 07-04-2011

La juez ha decretado el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza para Dorel Marcu. El joven rumano de 21 años que presuntamente estranguló a su novia en Torrejón y después mostró el cadáver a su padre a través de una webcam ya está en la cárcel. El caso ha quedado en manos del Juzgado de Violencia Sobre la Mujer número 1 de Torrejón de Ardoz.

Según explicaron ayer fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, Dorel se negó a declarar ante la juez, acogiéndose a su derecho. No lo hizo, en cambio, el martes por la tarde en la comisaría de Torrejón, donde permaneció desde su arresto hasta su paso a disposición judicial. En la comisaría sí reconoció su participación en el crimen, según fuentes policiales.

Hay que recordar que el suceso se conoció por el padre de Dorel, en Rumanía, que llamó a la Policía de su país en cuanto su hijo le mostró el cadáver de su novia, Viorela Alexandra Moldovan. Los agentes rumanos contactaron con el enlace de su Embajada en Madrid y éste llamó a la Policía Nacional. La chica, de 19 años, estaba embarazada de más de cinco meses. Iba a tener un niño.

Según las primeras investigaciones, se produjo una pelea entre la pareja cuando ella le contó que no era el padre de su hijo, sino un amigo de él. A continuación, Dorel comentó a su familia que ella le pegó con una lámpara en la cabeza, y entonces el la pegó en un costado, la intentó ahogar con sus propias manos y, como no pudo, agarró una corbata y la estranguló. Después se la quitó, pues cuando entraron los agentes ya no estaba.

El cadáver de la joven fue trasladado al Instituto Anatómico Forense, donde el martes por la mañana se le practicó la autopsia. También se sacaron muestras del bebé para comprobar si el ADN coincide también con el de Dorel Marcu.

El martes no acudió nadie a reclamar el cadáver de la chica, pero ayer por la mañana sí. La madre, Violeta C., fue acompañada de varias personas a la morgue, donde reconoció el cadáver. En un principio, según fuentes cercanas al caso, se realizará un entierro de caridad financiado por el Ayuntamiento de Torrejón. La madre está sufriendo mucho y tuvo que ser atendida por un psicólogo.

Violeta, que trabaja como empleada del hogar en Torrejón, se ha hecho cargo de su hija pequeña, que tiene 13 años y vivía con la víctima, y de la niña de tres años que tenían la fallecida Viorela y Dorel. La Policía se temió que la hermana también fuera asesinada, puesto que Dorel le dijo en el chat a su familia que la niña correría la misma suerte que Viorela.

Los familiares de Dorel explicaron en varias cadenas de televisión rumanas que la relación de la pareja se había deteriorado en los últimos tiempos. De hecho, él se había creado un perfil en una red social de contactos en la que se promocionaba como «separado» y «hetero».

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