Una patera con doce inmigrantes a bordo, entre ellos una mujer y dos niños, llegó ayer a Melilla procedente de Marruecos. La embarcación fue interceptada por efectivos del Grupo de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil sobre las 06.00 horas de este miércoles cuando se encontraba frente al litoral melillense.

Los inmigrantes fueron atendidos por personal sanitario una vez desembarcaron en tierra, para comprobar si presentaban algún problema físico, en especial los niños de corta de edad que iban a bordo de la embarcación, una lancha de plástico propulsada por un motor. Todos se encuentran en buen estado. A continuación, fueron trasladados a dependencias de la Jefatura Superior de Policía, donde se les abrió un expediente de expulsión, en aplicación de la Ley de Extranjería.

Sin embargo, mientras concluye este trámite documental, que puede durar meses e incluso a veces no se puede finalizar al no poder constatar la nacionalidad de los inmigrantes, han sido ingresados en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes.

Atención garantizada

Con esta nueva entrada de inmigrantes, el CETI supera la cifra de 600 acogidas, cuando su capacidad óptima es de 480. No obstante, el delegado del Gobierno dijo que, a pesar del aumento de internos, el centro no está saturado y todos los inmigrantes están atendidos en sus necesidades básicas, entre ellos el alojamiento, la manutención y las prestaciones sanitarias.