El Consejo de ministros de la UE decidió ayer eliminar los requerimientos de visado a los ciudadanos de Albania y de Bosnia Herzegovina, en una maniobra auspiciada por la Comisión europea que busca facilitar el anclaje de los países de los Balcanes occidentales en Europa. La comisaria Mallmstrom, responsable de Interior en el Ejecutivo comunitario, acogió la decisión al respecto manifestando que «los desplazamientos sin requerimiento previo de visado facilitarán los contactos entre la gente, mejorarán las oportunidades de negocio y darán a los habitantes de ambos países la posibilidad de conocer mejor a la Europa comunitaria».

En el Consejo, la decisión pasó sin problemas a pesar de las malas experiencias que Europa está cosechando por conceder libertad de movimiento a personas procedentes de países cuyos estándares de bienestar se encuentran a distancias abismales de los de Europa o, simplemente, no existen. Fuentes diplomáticas calificaban la pasada semana este género de decisiones de «regalos diplomáticos». Albania, uno de los países más pobres del continente, es un foco reconocido de la criminalidad internacional y la viabilidad de Bosnia como Estado independiente dista de haber sido probada.

La apertura del espacio Schengen a los albaneses y a los bosnios se suscita, además, cuando no ha sido aún resuelta la polémica que suscitaron en toda la UE el desmantelamiento de asentamientos ilegales en Francia y la expulsión de gitanos. Ayer, Barroso estaba en Bucarest tratando el asunto y hoy visita Bruselas el ministro rumano del Interior, Constantin Traian Igas, que se reunirá con la comisaria Mallmstrom.

La prensa gala daba cuenta hace días de que las ayudas otorgadas por la UE para facilitar la integración de los gitanos rumanos en Rumania no están llegando a sus destinatarios legítimos. Intentando apaciguar suspicacias, la Comisión decía ayer que pondrá en marcha con los dos países referidos un sistema de verificación de identidades específico de ciudadanos de estos países, «al objeto de hacer frente a los riesgos de uso indebido o de abuso de los procedimientos de asilo».