Más de mil inmigrantes menores han llegado solos a la Comunitat en dos años

Las Provincias, B. LLEDÓ | VALENCIA., 09-11-2010

Con la responsabilidad de sacar adelante a su familia, más de un millar de jóvenes inmigrantes han abandonado sus países de origen y han llegado a la Comunitat en los dos últimos años en busca de un futuro mejor. Para conseguirlo, han sobrevivido a un duro viaje en pateras o escondidos en los bajos de un camión.

«La mitad de los menores atendidos por la Generalitat son extranjeros no acompañados (MENAS)», apuntó ayer la consellera de Bienestar Social, Angélica Such, durante la inauguración de unas jornadas en la Universidad Politécnica de Valencia que versan sobre la protección e integración de estos jóvenes.

«La Comunitat es una de las que recibe más menores sin apoyo familiar, junto a Canarias y Andalucía», aseguró el director de las ponencias, Vicente Cabedo.

Sin embargo, por primera vez desde que comenzó el fenómeno de la inmigración, la llegada de estos chicos a Valencia, Alicante y Castellón se ha ralentizado. «Debido a la crisis económica, la progresión registrada desde hace más de una década se ha frenado. Hemos pasado de 1.749 menores extranjeros atendidos por el sistema de protección en 2008 a 871 a fecha de 30 de julio de 2010», indicó el secretario autonómico de Familia y Coordinación Social, David Calatayud.

Prueba de ello es que los 13 centros de acogida específica para ellos en la Comunitat «ya no están saturados como hace unos años», reconoció Cabedo, que imparte clases de derecho constitucional en la Universitat de València.

Dos de cada tres niños inmigrantes que aterrizan solos en la Comunitat son varones y aunque la mayoría provienen del norte de África, los lugares de procedencia están cambiando. «Marruecos y Argelia son los principales países de origen, aunque han aumentado los menores de Rumanía, Rusia, Ucrania y África Subsahariana», enumeró Calatayud. Además, sorprende la llegada de 17 niños de Pakistán que han llegado solos a la Comunitat en el último año.

Casi la mitad de MENAS tienen 17 años. Sólo un 5% no ha cumplido aún los 14. Precisamente, la determinación de la edad es uno de los escollos a los que se enfrentan las administraciones.

Los expertos coinciden en los problemas para precisar si la persona ha cumplido los 18 años cuando se sospecha que el pasaporte puede ser falso. «Es un problema importante. De todos los mayores de edad que se hacen pasar por menores se detecta un porcentaje muy bajo», lamentó Cabedo.

«Falta concreción en las pruebas radiológicas. son inexactas e ineficaces. Sólo se ajusta el segmento de entre 16 y 19 años, con lo que se concluye una presunción de minoría de edad cuando la apariencia externa no deja lugar a dudas de que es mayor», se quejó Calatayud, quien también pidió que se estudie que las entidades públicas puedan solicitar por ley la realización de estos exámenes y no sólo tenga esa competencia la Fiscalía.

En el caso de que tenga más de 18 años, el inmigrante se convierte en irregular por lo que se le puede expulsar. Si es menor debe ser objeto de protección «porque prima la minoría de edad sobre el estatus de extranjeros», apuntó Cabedo.

Such comentó que aspectos com el idioma, la cultura o las costumbres «motivan que estos jóvenes requieran un tratamiento específico».

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