La Escuela Náutico Pesquera de Ondarroa forma cada curso académico a un centenar de senegales. El ministro de Economía Marítima y Pesca de ese país africano, Khouraïchi Thiam, trasladó ayer el reconocimiento y agradecimiento de su Gobierno a los responsables y educadores del centro en un encuentro que se celebró en las instalaciones. En la cita también participaron el embajador de Senegal en España, Abas Ndiour, y el de España en ese país africano, Jorge Toledo, así como el viceconsejero de Pesca del Gobierno vasco, Jon Azkue. Durante la reunión que mantuvo con representantes de la colonia senegalesa en Ondarroa, que ronda las 300 personas, Thiam recalcó la importante labor que se realiza en la Escuela de Pesca.
«Al abrir las puertas a la formación, se abre una vía para la integración, se impide que esa persona se convierta en delicuente y se favorece que pueda ayudar a su familia a salir de la pobreza», manifestó. A su juicio, la tarea del centro ondarrés «tiene una importancia incalculable al dar una formación a jóvenes decididos de buena voluntad que buscan una vida mejor y con el que también pueden ayudar a su país», añadió.
En la actualidad, de la treintena de barcos que suman la flota ondarresa de altura cerca de un centenar de tripulantes son de nacionalidad senegalesa que previamente han recibido la formación necesaria en la escuela de pesca. «También se ha detectado un progresivo incremento en el personal senegalés embarcado en bajura, de ahí, la importancia que ese colectivo alcanza en el conjunto del sector pesquero vasco», indicó el viceconsejro de Pesca, Jon Azkue.
Por otra parte, en la actualidad hay cerca de una decena de barcos vascos que pescan bonito y atún en Senegal y que emplean a personal de ese país africano. Los intereses comunen también llevarán a la delegación senegalesa a visitar el centro tecnológico AZTI-Tecnalia, cuyos estudios sirven de soporte científico para numerosas decisiones que el Gobierno vasco adopta en materia pesquera.