Cinco inmigrantes de origen subsahariano llegaron a primera hora de ayer a Melilla nadando desde el cercano puerto marroquí de Beni – Enzar. Los indocumentados se ayudaron de cámaras neumáticas de las ruedas de coches, que utilizaron como flotadores, para salvar los apenas 200 metros de distancia que separan Marruecos del Dique Sur.

Los inmigrantes fueron avistados aproximadamente a las 07.40 horas del martes por los efectivos de la Guardia Civil que vigilan este litoral y fueron auxiliados por los especialistas del Grupo de Actividades Acuáticas (GEAS) del Instituto Armado para salir del agua. Debido a la baja temperatura del agua a esas horas del día, algunos presentaban síntomas de hipotermia, por lo que fueron atendidos por personal sanitario, antes de ser llevados a Comisaría donde se les abrirá expediente de expulsión y serán ingresados en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI). En esta instalación permanecerán hasta que se resuelva ese trámite documental, que muchas veces es imposible de concluir porque los inmigrantes vienen indocumentados y es tarea complicada conocer realmente de qué países provienen.