Fátima Nouri y Abdel Duidar con el boceto, en La Pólvora. :: V.V./AGM

El mercadillo de San Esteban, reubicado provisionalmente en El Malecón, se trasladará al jardín de La Pólvora y se convertirá en un atractivo zoco o mercadillo artesanal. El alcalde Miguel Ángel Cámara ya ha dado el visto bueno al traslado de los vendedores y coincide con ellos en que el lugar idóneo para reubicarse de forma ya definitiva es el jardín de La Pólvora, también conocido como El Salitre, porque es un sitio céntrico y no causará molestias al vecindario.

Nada más terminar la Feria de Murcia, el alcalde ha hecho un hueco en su apretada agenda para recibir a la directiva de la Asociación de Vendedores de San Esteban para conocer de primera mano sus inquietudes y la necesidad urgente de ser trasladados a una nueva ubicación más céntrica en donde puedan reactivar las ventas para sacar su negocio adelante y mantener a sus familias.

Fátima Nouri y Abdel Duidar, presidenta y vicepresidente de la Asociación no tienen más que palabras de agradecimiento por la receptividad que han encontrado en el alcalde Cámara y en el concejal de Mercados, Cristóbal Herrero, con quienes se reunieron el miércoles.

Ambas partes, Ayuntamiento y comerciantes, coinciden en la necesidad de instalar un mercadillo «limpio, moderno y digno» que dé vida al centro, sin molestar a los vecinos.

Abdel y Fátima indicaron a ‘La Verdad’ que «el alcalde nos ha confirmado el traslado a La Pólvora, y en cuanto al proyecto de casetas que le hemos presentado, nos dijo que lo ve aceptable y merecedor de un estudio profesional con el fin de lograr un diseño adecuado y que nos permita ejercer nuestra actividad en condiciones óptimas».

Se ubicarán pegados al muro, con la fuente y el Servicio Municipal de Estadística a la derecha. «Hemos desestimado la idea de estar más cerca de la zona de juegos infantiles o del jardín aunque por allí pase más gente – indica Abdel Duidar – porque hemos preferido no interferir ni molestar a los que pasean o a los niños que juegan». Abdel Duidar, que es economista y estudió en la Universidad de El Cairo, adquiriendo también conocimientos de arquitectura, ha diseñado un prototipo con el modelo de puestos que les gustaría instalar en el jardín del Salitre.

Irían pegados al muro que divide La Pólvora y se construirían en hierro forrado de madera, con el tejado de chapa metálica cubierta con un tablero de PVC en forma de teja. Los puestos tendrían un fondo de 3 metros por 2,80 de altura y una anchura de 5 metros. Además salvarían dos árboles que hay cerca del muro.

Abdel Duidar propone que el nombre del mercadillo sea El Zoco y para que sea más vistoso ha propuesto una entrada a modo de pórtico con un arco donde figuren diversos símbolos como la media luna, la cruz de Caravaca, la estrella de David o el om indio, que representen las distintas culturas. No en vano, entre los vendedores los hay de diferentes nacionalidades como marroquíes, egipcios, senegaleses, argentinos, bolivianos, colombianos y chilenos, entre otros.

El número de puestos no será superior a la treintena. Cuando se trasladaron desde San Esteban a El Malecón había 52, pero la mitad ni abrían sus puertas y algunos ni siquiera pagaban sus impuestos. Tras la inspección realizada por el servicio de Mercados se ha realizado una depuración y, de hecho, ahora en El Malecón ya están reagrupados los puestos que van a continuar su actividad.

En cuanto a la fecha del traslado, será en octubre o noviembre porque lo importante es «hacerlo bien hecho».