El Partido de los Extranjeros (PDEX) ha empezado a rodar en Alicante. Constituido a principios de septiembre, buscará hacerse un hueco en la ciudad en las próximas elecciones municipales, que se celebran el 28 de mayo del año que viene.

No es casualidad que sea Alicante la ciudad elegida, con un porcentaje del 26% de población extranjera, si bien la cifra se queda pequeña en comparación con algunos municipios de la provincia, con tasas de casi el 50%. De hecho, el partido tiene interés en aumentar su presencia en otras localidades, pues ofrece en su página web datos de contacto para abrir nuevas sedes con la intención de captar el granero de votos procedentes de la población inmigrante. En 2011 serán medio millón los extranjeros con posibilidad de acudir a las urnas, entre los comunitarios que ya tenían reconocido el derecho en 2007 y los cerca de 140.000 procedentes de terceros países, que podrán votar por primera vez siempre que cumplan unos requisitos de residencia y exista un convenio de reciprocidad entre España y su país. En la actualidad, los siete acuerdos ya rubricados cubren a 70.193 extranjeros. Los otros ocho están pendientes de firma.

De momento, la idea es ‘colarse’ en la vida pública de Alicante. El secretario general es un abogado afincado en la ciudad, Giulio Adinolfi, que destaca en una nota de prensa uno de sus primeros objetivos. «Queremos una concejalía de Inmigración que se dedique a tutelar e informar a los ciudadanos extranjeros», señala.

«Para los no españoles la información es un bien de lujo. Algunas comunidades de extranjeros se relacionan entre ellas, y no saben cómo funciona la organización de la Administración. Algunos llegan a pagar más de 2.000 euros para renovar una tarjeta, que es un trámite básico, rápido y con una tasa normalita», continúa. «Queremos información, queremos cursos de idioma gratuitos con horarios flexibles para la población inmigrante trabajadora. Queremos una política local que escuche las problemáticas de los colectivos extranjeros», sentencia la nota, que también incluye declaraciones de la presidenta, Victoria Marchuk.

«Somos personas normales y trabajadores y no queremos que existan, como en Alicante, barrios únicamente para extranjeros, esto nos discrimina», sentencia, después de lamentar las prácticas de «muchos españoles que se aprovechan de nosotros en el trabajo para explotarnos económicamente».

Ayer, en declaraciones recogidas por Europa Press, Adinolfi abogaba por una mayor participación en la vida de la ciudad. «Ya basta de exclusión, de disminución de nuestros derechos, de denegarnos la participación a la decisiones que nos afectan. Somos extranjeros, somos estructuralmente y socialmente españoles, somos integrados. Queremos la integración, pero también nuestras tradiciones», resaltó.

Comunidad integradora

Además, justifican la creación del partido en la Comunitat al ser la única región que cuenta con una ley de Integración, promovida por el conseller Rafael Blasco. Uno de los objetivos de la norma es, precisamente, fomentar su participación en la vida pública valenciana.

No es la primera experiencia de este tipo en la Comunitat. En 2006, un constructor afincado en Burriana, Augusto Tecu, creó en Castellón el Partido Independiente Rumano (PIR), que generó muchas expectativas, incluso con acercamientos al PP o al PSPV. Finalmente, tres días antes de los comicios, retiró su candidatura y pidió el voto para EU.